Los poros no pueden desaparecer: cosméticos para minimizar su aspecto

Seguro que ya lo tendrás claro, pero no está de más recordarlo. Los poros de la piel son unos orificios que conectan con las glándulas sebáceas y sudoríparas a través de los cuales se libera sudor y sebo. Esto ayuda a hidratar la piel, a regular la temperatura corporal y ayuda a eliminar pequeñas cantidades de toxinas.

Tenemos poros en todo el cuerpo (aunque se concentran más en la nariz, la frente y el mentón) y es imposible eliminarlos. Como mucho, lo que se puede hacer es minimizarlos para que no sean tan visibles. A continuación, cosmetólogas y expertas dermocosméticas explican por qué no se pueden eliminar y cómo hay que hacerlo para trabajar la apariencia de los poros.

¿Por qué no se pueden eliminar los poros de la piel?

Lo primero que hay que saber es que los poros ni se abren ni se cierran, tampoco se hacen ni más grandes ni más pequeños. "No son músculos y su tamaño es fijo", advierte Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD. Por mucho que te lo parezca, no cambian de tamaño, "es solo una ilusión óptica" causada por el sebo, las células muertas y los residuos que se acumulan. "Cuanta más acumulación haya de células muertas, grasa e impurezas, mayor sensación habrá de poro grande", añade Estefanía Nieto, directora de dermocosmética de Medik8.

Uno de los factores que influyen en que los poros se vean más grandes es la pérdida de colágeno de la piel con el paso de los años, explica Lara González, cosmetóloga de Byoode. Otros motivos, según la experta, son la exposición al sol sin protección y fumar.

Si el tema de los poros demasiado visibles te preocupa, hay opciones para minimizar este efecto: "Lo que sí se puede hacer es trabajar en nuestra piel para que no dé la sensación de que son tan grandes y mejorar drásticamente su apariencia para que se quede sensación de acabado pulido", cuenta Lara González.

¿Cómo se pueden minimizar los poros de la piel?

Para este cometido existen varios productos de cosmética y las expertas nos enseñan cuáles son y cómo usarlos:

• Prebases de maquillaje. Crean una película sobre la piel que "suaviza y da un aspecto uniforme, como si los poros desaparecieran", comenta Raquel González. Sin embargo, como todo, no vale abusar de ellas porque pueden obstruir los poros, "especialmente los que contienen siliconas oclusivas", y fomentar la aparición de acné. Por eso, la experta recomienda "los que contienen glicerina".

• DMAE. La cosmetóloga sugiere utilizar este ingrediente, ya que "tiene un potente efecto tensor y seborregulador" que reafirmar y minimiza la apariencia de los poros.

• Ácido glicólico. Isabel Reverte, directora dermocosmética de Ambari, destaca este exfoliante "que elimina células muertas y promueve la renovación celular". Además, favorece una piel más luminosa y uniforme.

• Ácido salicílico. "Penetra mejor la barrera lipídica y limpia los poros de la grasa acumulada", detalla Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8.

• Retinoides. Por su parte Marta Agustí, directora dermocosmética de Omorovicza, aclara que estos "aceleran la regeneración celular, mejora la textura de la piel y afina los poros".

Por último, tener poros sin impurezas permite a la piel absorber más eficazmente los productos, por eso es importante mantener una rutina de limpieza facial.

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