RUTINA SKINCARE CORRECTA
¿Por qué aparecen esas molestas pelotillas al aplicarte cosméticos y cómo evitarlas?
¿Por qué parece que te has pasado una goma de borrar por la cara cada vez que te haces tu rutina de belleza? Hay algo que estás haciendo mal y en este artículo te lo explicamos. ¡Dile adiós a esas molestas pelotillas!
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A estas alturas, ya tenemos claro que seguir una rutina básica de skincare es clave para cuidar nuestra piel. Ya tenemos todos los productos, sabemos el orden de aplicación al dedillo y, aun así, ¿por qué parece que te has pasado una goma de borrar por la cara? Tranquila, no es que tu sérum sea malo ni que necesites una crema hidratante más ligera. El problema no está en los productos, sino en la forma en que los estás aplicando. Pero no te preocupes, estamos aquí para enseñarte la forma correcta de hacerlo y olvidarte de esas incómodas acumulaciones o residuos que arruinan tu rutina. ¡Manos a la obra!
La clave está en la aplicación
Es muy fácil caer en la tentación de culpar a los productos o pensar que no hemos elegido los más adecuados cuando esos molestos restos aparecen en nuestra piel. Sin embargo, como señala Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Byoode, "la realidad es que puede deberse, en gran medida, a cómo los aplicamos". Entonces, ¿cuál es el truco? "Sólo soy una chica" con su sérum, ¿cómo se aplica bien?
La clave está en la forma de aplicación (masajeando o a toques) y dejar absorber un producto antes de seguir con la rutina. "La mayoría de las veces, las pelotillas se producen porque arrastramos el producto o aplicamos varias capas sin dejar que cada una se absorba correctamente", explica González.
Estar hasta "las pelotillas"
Es importante entender que cada producto requiere una técnica de aplicación distinta, no es lo mismo un sérum que un protector solar, las densidades son distintas y para que se absorban correctamente debemos hacerlo de forma diferente. Mireia Fernández, directora de dermocosmética de Perricone MD aclara cuál es el secreto clave: "los sérums deben extenderse suavemente y dejarse absorber antes de aplicar el siguiente paso. Si se trata de cremas o protectores solares, es mejor presionar el producto contra la piel en lugar de masajear en exceso".
El truco definitivo, confiesa Raquel González, es sellar cada capa de producto con movimientos suaves y mínimos, asegurándonos de no arrastrar las texturas anteriores. Pero cuidado, si nos pasamos masajeando podemos acabar levantando las capas anteriores y generar restos, además de disminuir la eficacia de los cosméticos.
Finalmente, si pese a aplicar correctamente los productos continúan formándose residuos, el problema podría estar en la compatibilidad del cosmético con tu piel o con otros productos de tu rutina. En estos casos, puede ser el momento de reevaluar las combinaciones o incluso sustituir el producto problemático por otro más adecuado.
Mejora tu rutina de skincare
Ahora que ya sabes por qué pasa y que es un problema más común de lo que parece, vamos a ampliar porque no siempre se reduce únicamente a la técnica de aplicación. Existen otros factores clave que también pueden contribuir a la formación de esas incómodas bolitas en tu piel:
- Incompatibilidad entre productos. Al mezclar cosméticos de diferentes marcas, los ingredientes pueden no combinar bien entre sí, lo que puede generar las temidas bolitas. La mayoría de marcas formulan sus productos haciendo que sea compatibles, pero cuando mezclamos cosméticos de distintas firmas, puede haber ingredientes que no se llevan bien entre si.
- Uso excesivo de producto. Otro de los errores más habituales es aplicar más cantidad de la necesaria. Este exceso satura la piel, creando capas acumulativas que no se absorben correctamente. Como resultado, aparecen residuos visibles. Recuerda que menos es más cuando se trata de cosméticos.
- Componentes específicos. Según Patricia Garín, experta en dermocosmética, componentes como siliconas o parafinas presentes en algunos cosméticos pueden generar cierta gomosidad. Esto no implica que el producto sea de mala calidad, pero sí puede ser incompatible con otros productos de tu rutina.
¿Cómo prevenir este problema?
En resumen, para evitar este problema y devorar con tu rutina de skincare, asegúrate de aplicar los productos en la cantidad justa, respetando los tiempos de absorción y utilizando la técnica adecuada. Y si las pelotillas persisten, ¡quizá sea hora de revisar tu rutina y los productos que utilizas!
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