¿Qué es el Láser Emerald? El último tratamiento estético que se ha hecho Paula Echevarría en el cuerpo

Cuando se acerca el verano y toca ponerse el bikini, a todas nos entran las prisas por sacar nuestra mejor versión. Sin embargo, por mucho gimnasio y dieta equilibrada que sigamos, hay zonas de grasa localizada que se resisten. Y aunque no pasa nada —porque cada cuerpo es bonito tal y como es—, si se dispone de un extra para invertir en autocuidado, no está de más complementar el estilo de vida saludable con algún tratamiento de belleza que nos ayude a ver resultados.

En este sentido, Paula Echevarría está siempre al día de los tratamientos más innovadores para moldear su figura. Uno de los últimos en los que ha confiado es el Láser Emerald, un procedimiento seguro para reducir contorno y perder volumen. ¿De qué se trata exactamente?

Así es el láser esmeralda con el que Paula Echevarría moldea su figura

Según el centro estético al que ha acudido la actriz, el Láser Emerald es el láser más avanzado del mundo para eliminar grasa sin dolor y sin efectos secundarios. Se puede aplicar "de forma eficaz" en cualquier parte del cuerpo con acumulaciones de grasa localizada. Además, también resulta útil para "tratar la celulitis en zonas habituales como glúteos y muslos, así como en áreas más problemáticas del abdomen o la papada".

Con varias sesiones de Láser Emerald se logra reducir el contorno y volumen de la zona tratada, al tiempo que disminuyen la inflamación y la sensación de hinchazón. Pero eso no es todo: también mejora la circulación sanguínea, aumenta los niveles de energía y puede aliviar dolores articulares, musculares o de espalda.

Se trata, además, del único láser de bajo nivel aprobado por la FDA para tratar pacientes con un IMC de hasta 40. Es decir, también está indicado para personas con obesidad (IMC superior a 30).

¿Cómo es una sesión de Láser Emerald?

Como hemos visto en las historias de Instagram de Paula Echevarría, una sesión de Láser Emerald es de lo más sencilla. Llegas, te tumbas en una camilla y te colocan una máquina en forma de semicírculo que proyecta un láser de color verde sobre la zona a tratar.

A diferencia de otros procedimientos como la liposucción o la criolipólisis —que destruyen las células grasas y pueden provocar un efecto rebote, ya que el cuerpo tiende a compensar regenerándolas en otras zonas—, este láser no elimina los adipocitos. En su lugar, licua la grasa que contienen y genera pequeños poros en su superficie, permitiendo que la grasa salga de forma natural a través del sistema linfático.

Sin dolor, sin hematomas, sin necesidad de reposo. Terminas la sesión y puedes seguir con tu día como si nada. Lo que sí te avisamos es que este tratamiento no es barato...

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