CANSANCIO, NO PODRÁS CON NOSOTROS
Complementos naturales que puedes tomar para decir adiós a la astenia
Hay quien no tiene ningún tipo de síntoma y quien pasa una primavera de quema entre el cansancio, el abatimiento, las alergias y esas pocas ganas de vivir que se le quedan cuando cambia el tiempo. Se llama astenia primaveral, y aunque en líneas generales suele irse del mismo modo que llegó en unas semanas, nunca está de más tirar de complementos naturales para acabar con ella.
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Jalea real
Este producto natural de la secrecón de unas glándulas de las abejas nodrizas, encargadas de llevar el alimento a las reinas y a las larvas los primeros días de vida. De hecho, la longevidad de las abejas reinas está directamente relacionada con esta sustancia, que se considera uno de los alimentos más concentrados de la naturaleza, por la gran cantidad de vitaminas, minerales y nutrientes. La jalea real aporta energía e incluso euforia (aunque no notaremos los efectos inmediatamente), de manera que es ideal para épocas de cansancio, estrés, astenia o para personas que acaban de pasar una enfermedad, niños o ancianos. No necesita digestión y pasa directamente a la sangre, además de ser un producto 100% natural que no va a dañar nuestra salud y podemos dejar de tomar cuando queramos.
Su acción bacetericida y antibiótica nos protege de las enfermedades, además de contribuir a regular la tensión arterial y mejorar el rendimiento físico y mental. Pese a que aporta hidratos de carbono, éstos son de absorción lenta, de manera que –contra lo que argumentan algunas abuelas– la jalea real no nos va a hacer engordar.
Gingseng
Es, junto a la jalea real, uno de los superventas primaverales, gracias a su aporte de energía y vitalidad de acción prácticamente inmediata. El gingseng no sólo contribuye a superar la fatiga, sino que, al mejorar la irrigación cerebral, es perfecto cuando tenemos que hacer un esfuerzo mental o en épocas en que necesitamos una especial concentración (muchos estudiantes lo consumen el época de exámenes).
Esta planta regula el colesterol, protege nuestra salud cardiovascular, nos ayuda a eliminar las toxinas de nuestro cuerpo, mejora el ánimo y regula los niveles de hierro. Pero cuidado, porque el gingseng puede tener también una serie de efectos secundarios que hacen que no esté indicado para todo el mundo: puede provocar ansiedad, nerviosismo e insomnio, además de jaquecas o migrañas. Por este motivo, es importante que se consuma siempre en las dosis adecuadas, por prescripción médica o farmacéutica.
Hipérico
El hipérico o hierba de San Juan es una planta de uso muy común en algunos países como Alemania, a la que se ha bautizado como "el Prozac natural" por su capacidad para mejorar el ánimo. Esta hierba se considera un antidepresivo natural para casos de depresión leve, de manera que es ideal para los bajones de ánimo propios del otoño y la primavera. Tiene, además, propiedades digestivas y cicatrizantes y, como ocurre con otras hierbas, no notaremos sus efectos inmediatamente, sino tras un período de consumo. Conviene consultar con un profesional antes de iniciar su consumo.
Espirulina
Otro clásico de estas fechas es la espirulina, un alga que hace unos años se puso de moda en Occidente gracias a la gran cantidad de vitaminas y minerales esenciales que posee, además de hierro asimilable, betacarotenos (que mejoran la salud de la piel y la degeneración muscular, entre otras cosas) y proteínas digeribles, lo que la hace muy interesante para los vegetarianos. De hecho, la NASA ha hecho estudios sobre la espirulina como potencial alimento de los viajes espaciales, pues asegura que 1 kg de espirulina tiene los mismos nutrientes que 1.000 kg de verduras. Es, además, rica en vitamina B-12, ideal para la salud de los nervios y tejidos.
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