IDEAS PARA AHORRAR TIEMPO
Consejos para hacer tu batch cooking más seguro y saludable
¿Tienes poco tiempo para cocinar y te cuesta llevar unos buenos hábitos? Te damos algunos tips para facilitar tus comidas de la semana.
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El batch cooking es un método que propone cocinar en unas pocas horas todas o la mayor parte de las elaboraciones culinarias previstas para ingerirse durante la semana.
Se trata de planificar las comidas con antelación y optimizar los tiempos de cocinado, especialmente en aquellas personas que carecen de tiempo en su día a día de trabajo.
Este sistema permite comer platos más elaborados, más apetitosos y probablemente llevar una alimentación más saludable.
Si bien es cierto, es una herramienta muy útil en ciertos contextos, quizás no sería la forma de empezar a llevar una alimentación más saludable en una persona que todavía no tiene unos hábitos saludables arraigados.
Sería más bien la punta de la pirámide y habría muchas cosas que trabajar antes de iniciarse en un batch cooking.
Batch cooking a base de verduras
Las verduras y las hortalizas deberían ser el ingrediente mayoritario que conforme nuestros platos, ocupando al menos la mitad de este, tal cual representa el plato de Harvard.
Sin embargo, cuando tenemos poco tiempo para cocinar, las verduras y hortalizas suelen ser las grandes olvidadas. Es por ello que tener elaboraciones con verduras ya listas para tomar, va a facilitar cubrir las recomendaciones de consumo, especialmente si tenemos poco tiempo para planificar, comprar y/o cocinar.
Si no tienes tiempo de hacer un batch cooking completo, al menos, te recomendaría hacerlo solo con las elaboraciones de verduras y hortalizas: cremas de verduras, guisos de verduras, verduras horneadas… Son elaboraciones que quedan bien tanto si se congelan, como si se refrigeran y que luego se pueden combinar con diferentes platos.
Enfriado y conservación de los alimentos
Después de cocinar los alimentos, el enfriado debe ser lo más rápido posible, ya sea con refrigeración o con congelación.
Existen diferentes métodos de conservación. Si hacemos el batch cooking una vez por semana, no podemos tener los alimentos refrigerados tanto tiempo, ya que según el alimento empleado, deberían estar en refrigeración entre 2 a 4 días.
Si queremos que el batch cooking dure toda la semana, necesitamos utilizar otros métodos de conservación complementarios como la congelación o la realización de conservas esterilizadas, pero estas últimas presentan muchos riesgos en elaboración casera ya que no disponemos de los equipos adecuados para hacerlas con seguridad y se necesita formación específica para ello.
La cocción al vacío no es un sistema seguro de conservación para toda la semana, así que el sistema de preferencia sería la congelación, aunque no todos los alimentos quedan bien congelados, como es el caso de la pasta, el arroz, platos con salsas emulsionadas o las patatas.
En general, los platos preparados congelados en un congelador de 4 estrellas, no deberían durar más de 3 meses.
No descongelar a temperatura a ambiente
Descongela siempre en el frigorífico, en un recipiente cerrado, en el estante más bajo o bien el microondas, en la función de descongelar.
Recalentamiento
Realiza un solo recalentamiento del plato y que sea inmediatamente antes de su ingesta
Fondo básico de despensa
Es bueno que tengas recursos express en tu fondo de despensa básico que te ayuden a completar tus platos con las elaboraciones de tu batch cooking. Ten siempre en casa conservas de legumbres ya cocidas, de pescado o de marisco al natural o en aceite de oliva virgen, de verduras, cacitos de arroz integral o quinoa ya cocidos, pescado o marisco congelado, verduras congeladas…
Por ejemplo, puedes tener ya preparado un pisto y un día lo mezclas con garbanzos ya cocidos, otro con un cacito de arroz integral y una conserva de ventresca… De esta forma no tienes que dejar preparadas absolutamente todas las elaboraciones, pero no te requerirá perder tiempo entre semana.
Cómo hacer un batch cooking
1. Empieza escribiendo tu menú semanal.
2. Haz la lista de la compra con todo lo que te falte y compra todos los ingredientes que necesites.
3. Haz una lista de las elaboraciones que tendrás que preparar con antelación.
4. Destina una mañana o una tarde para cocinar todas las elaboraciones.
5. Conserva cada elaboración en función de cuándo esté previsto consumirla.
6. Guarda esta planificación, es trabajo que ya tienes hecho y que puedes aprovechar para utilizar otra semana.
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