Este es el secreto para que nada más se te vuelva a pegar en la sartén

Es sencillísimo y damos fe de que ¡funciona! Se trata de poner a fuego medio la sartén bien cubierta de sal (puede hacerse con cualquier tipo de sal, pero nosotros preferimos sal gorda), calentarla hasta que la sal comience a tener un tono doradito, retirar del fuego y... ¡la sartén ya estará lista para su uso sin que se peguen los alimentos! Acuérdate de retirar la sal correctamente con una servilleta, ya que si no los alimentos que cocines pueden quedar excesivamente salados.

Además de este truco definitivo para evitar que se peguen los alimentos, es importante seguir otros consejos a la hora de mantener en buen estado nuestras sartenes y ollas:

- No almacenarlas unas sobre otras.

- No fregarlas nunca con estropajos, sino con esponjas.

- No utilizar nunca instrumentos metálicos para cocinar, sino siempre cucharones de madera o de silicona.

- Seca siempre bien la sartén antes de guardarla.

- Nunca la pongas a calentar, ni siquiera durante un breve periodo de tiempo, sin haberla engrasado antes, ya sea con aceite o con mantequilla.

- No las laves nunca mientras estén calientes: espera que lleguen a temperatura ambiente.

-Aunque los lavavajillas son cada vez menos agresivos y cada vez hay más personas que los utilizan para toda la vajilla, es preferible lavar las sartenes a mano. Son objetos muy delicados que pierden con facilidad su adherencia, especialmente las de teflón.

- En ocasiones, los alimentos se pegan porque no estamos atentos ni al tiempo ni a la temperatura de cocción y cualquier descuido puede echar por tierra nuestro plato. Mientras cocinamos, debemos estar atentos y vigilar constantemente el fuego y el tiempo que requiere cada alimento para su correcta elaboración, especialmente en el caso de las frituras.

¿Estás pensando en renovar tus sartenes? Aquí tienes algunas cosas a tener en cuenta antes de hacerlo.