Ni fruta ni tostadas, el desayuno perfecto son los garbanzos: así lo dice un estudio

Te despiertas, te lavas la cara… Y lo primero que haces es desayunar. Aunque son muchas las personas que han cogido la costumbre de saltarse este paso, se trata de la comida más importante del día.

Lo más común es desayunar tostadas con mantequilla y mermelada, galletas o tortitas para los más golosos. También son habituales las tostadas con aguacate, con tomate o con jamón para los que prefieren un desayuno salado. Sin embargo, el desayuno perfecto no lleva nada de esto, sino un ingrediente que no te imaginas: GARBANZOS.

Según un estudio de la Universidad de Harvard, incluir garbanzos en el desayuno mejora notablemente la comida y la salud. Y es que, al ser una fuente de proteínas y fibra, son la opción ideal para mantenernos saciados durante más tiempo.

No se trata solo de comer garbanzos para desayunar, sino incluirlos como algo adicional. Esto hará que controles mejor el apetito e, incluso, que mejore tu estado de ánimo y tu rendimiento cognitivo a lo largo de la mañana.

Si no lo has probado, estás a tiempo. Porque, además, aportan carbohidratos de bajo índice glucémico. ¿Esto qué significa? Que liberan energía de manera gradual, evitando así los picos de azúcar en la sangre que se asocian con los alimentos más comunes del desayuno.

Empezar el día con mucha energía, mirando por tu salud a largo plazo y con una alimentación saludable SÍ es posible.

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