EL AUTÉNTICO Y TRADICIONAL

Gazpacho andaluz: Receta auténtica, fácil y refrescante

La mejor alternativa para combatir el calor dentro de la cocina es siempre una sopa fría y dentro de la cocina tradicional andaluza no hay mejor opción como el gazpacho. Por ese motivo, te damos una sencilla, rápida y deliciosa receta para conquistar todas las comidas de amigos de este verano.

Gazpacho andaluz

Gazpacho andaluzPixabay

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Desde NovaMás nos hemos propuesto que nuestros lectores sean unos auténticos expertos en sopas frías, el rey de los platos en la cocina tradicional andaluza, la cual tanto nos ayuda a combatir el calor en verano. No existe mejor opción culinaria para seguir una correcta alimentación durante las épocas de altas temperaturas, cuando el apetito escasea, las fuerzas no abundan y lo único que apetece es algo fresco y poco pesado.

De esta manera, entre todas las opciones de sopas frías, el gazpacho es el plato estrella del verano. Un plato barato, refrescante y muy nutritivo que gusta a grandes y pequeños. Una receta que va más allá de la tradición, ya que, más allá del gazpacho clásico, existen multitud de versiones que se han consolidado en nuestro día a día. Además de ser el padre de otras recetas frías como el salmorejo cordobés, la porra antequerana o el ajoblanco.

Son muchas las alternativas que hay. Sin embargo, en este artículo te daremos la auténtica y tradicional receta del gazpacho andaluz. El de siempre. El de toda la vida. El que hace tu abuela en casa. Ese, el gazpacho inconfundible e irremplazable.

Ingredientes necesarios para el auténtico gazpacho

  • 100 ml de aceite de oliva virgen extra.
  • 30 ml de aceite de oliva virgen extra.
  • 30 ml del vinagre de Jerez, aunque también puedes escoger la opción que más te guste.
  • 1 kg de tomates rojos. A poder ser, que estén bien maduros.
  • 1 diente de ajo.
  • 150 gramos de pan blanco, molletes andaluces o, si no encontráis, pan de trigo blanco con dos o tres días.
  • 1 pimiento verde grande.
  • 1 pepino.
  • Un pellizco de y agua.

Para la guarnición:

  • 1 cebolla pequeña.
  • Un tomate.
  • 50 gramos de pimiento verde.
  • 50 gramos de pepino.

La elaboración tradicional paso a paso

Antes de iniciar el proceso:

1.Limpiamos los tomates y la verdura. Es importante que todo esté limpio, ya que los alimentos no van a ser cocinados.

2.Cortamos en cuartos los tomates y los añadimos en un bol grande.

3.Quitamos la piel y los extremos al pepino.

4.Cortamos el pepino en trozos pequeños.

5.Hacemos lo mismo con la cebolla y el pimiento verde.

6.Cortamos el pan en trozos pequeños y le añadimos un poco de agua.

7.Dejamos reposar el pan durante 10 minutos para que se ablande y se logre batir con mayor facilidad.

8.Pelamos el diente de ajo, le quitamos el centro para que no se repita y lo añadimos al bol con el resto de alimentos.

En preparación:

1.Cogemos el bol con el tomate, las verduras y todos los alimentos y le echamos el aceite de oliva virgo extra, el vinagre de Jerez y la sal.

2.Trituramos con la batidora hasta que quede una salsa líquida.

3.Pasamos la salsa por un colador y retiramos los posibles trozos de piel y las pepitas.

4.Probamos si está bien de sal y, si es necesario, rectificamos y corregimos.

5.Metemos el bol en la nevera durante un par de horas.

6.Emplatamos nuestra receta en un plato hondo o un cuenco y lo acompañamos de jamón ibérico o unos taquitos de queso.

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