UNA NUEVA VERSIÓN
Leche frita de avena: la receta ligera de un postre tradicional
Consigue una leche frita más suave, cremosa y saludable con esta receta.
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Semana Santa está marcada por las procesiones, las vacaciones y… ¡Los dulces! Uno de los postres más típicos y deliciosos es la leche frita. La prima de las torrijas es un imprescindible que debes cocinar estas fiestas. Si eres amante del dulce, te traemos la receta perfecta con un toque muy especial.
Su origen
Se trata de una de las recetas más populares, históricas y fáciles de elaborar de la cultura española. De origen árabe, es un manjar que se suele comer sobre todo en el norte de la península, como el País Vasco y Galicia, aunque también es muy reconocido en Castilla y León o Murcia. Con el paso del tiempo, se ha extendido al resto de comunidades autónomas.
Fácil, atemporal y para todos
Aunque sea un dulce típico de estas festividades, se puede consumir en cualquier época del año, ya que se puede tomar tanto caliente como frío. Además, siempre será una buena opción para ofrecer como postre, comerla en la merienda o incluso en el desayuno.
Su sencilla elaboración no te va a llevar demasiado tiempo, ni tampoco vas a tener que gastarte mucho dinero, pues los ingredientes que debes usar son comunes en nuestras despensas.
Algo cierto es que los dulces típicos de las festividades suelen ser bastante pesados y poco saludables. Por ello, nosotros te ofrecemos una alternativa a la de siempre mucho más ligera, elaborada con bebida vegetal de avena, que además, la hace apta para los intolerantes a la lactosa.
Cómo elaborar leche frita de avena
Ingredientes
- Un litro de bebida de avena
- 2 huevos
- Una rama de canela
- Cáscara de limón y de naranja (opcional)
- Vainilla
- 60 g de maicena
- 90 g de azúcar
- Harina de avena
- Aceite de girasol
Elaboración
1. En un cazo, vuelca toda la bebida vegetal, a excepción de un vaso. Añádele la canela, las cáscaras (si las has usado) y la vainilla y calienta la mezcla durante 15 minutos, tapándola para que infusione mejor. Si quieres un sabor más intenso, puedes dejar reposar la mezcla durante un día.
2. En un bol, añade la maicena y el vaso de la bebida de avena fría apartada. Mézclalo muy bien.
3. Una vez tengas perfectas las dos mezclas, es el momento de unirlas. Cuela la bebida caliente en la mezcla fría y remueve bien, ¡Que no queden grumos!
4. Cocina a fuego lento la mezcla final hasta que todo espese y la harina cruda se cocine, removiendo sin parar para evitar que se pegue en las paredes del cazo.
5. Cuando esté lista, vuélcala en una fuente para que enfríe, primero a temperatura ambiente y luego durante una hora en el frigorífico. El grosor de la masa debe ser de aproximadamente cuatro centímetros.
6. Corta en pequeños rectángulos la masa, enharínala y pásala por huevo.
7. Fríe los bocaditos en abundante aceite de girasol, hasta que se doren, y pásalos a un papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
8. Mezcla un poco de azúcar y canela - como si hicieras torrijas - y reboza tus bocaditos.
Puedes acompañar tu leche frita con caramelo, o echar un poco de cacao en polvo o incluso limón a la mezcla inicial para darle un toque diferente.
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