¡NO LA TIRES!
Mermelada de aprovechamiento: la solución a la fruta casi pocha
Da una nueva vida a los productos a punto de pasarse y no vuelvas a tirar una pieza de fruta.
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¿Vas a tirar la fruta demasiado madura? ¡No lo hagas! Hay maneras muy sencillas de darle una nueva vida a los productos que están a punto de pasarse y convertirlos en alimentos riquísimos y muy apetecibles.
En el caso de la fruta pocha, transformarla es aún más fácil, ya que, al ser un producto dulzón, tiene mucha versatilidad y puede encajar en muchas más elaboraciones de las que imaginas.
Un claro ejemplo de producto en el que la protagonista es la fruta es, sin duda, la mermelada. Por esta razón, en este artículo, te enseñamos como hacerla para que no vuelvas a desperdiciar ni una pieza de fruta más.
Receta de mermelada casera
La mermelada de aprovechamiento es una opción fantástica para alargar la vida a la fruta fresca, ya que, lejos de fermentar en pocos días, el producto puede aguantar en buen estado durante meses. Además, la mermelada puede hacerse con una gran variedad de productos y no solo con las piezas tradicionales, como la naranja y la fresa.
Al final, una mermelada de aprovechamiento se hace con el propósito de no desechar comida. Así que, atrévete a hacerla con todo tipo de fruta, como mandarinas, uvas, manzana, granada, cereza, melocotón o peras. Hay un sinfín de productos que pueden tener cabida dentro de esta preparación. En NovaMás te proponemos la siguiente receta:
Ingredientes:
- ½ de limón o lima (en función del punto de cítrico deseado. El limón también sirve para que el preparado se conserve mejor).
- 2 zanahorias (si la fruta está muy madura, la zanahoria ayuda a que la mermelada coja más consistencia).
- 140 gr de fresas bien maduras
- 1 manzana madura
- 380 gramos de azúcar
- Una pizca de canela en polvo
Las dos piezas de fruta las puedes elegir a tu gusto. Nosotras hemos escogido la manzana y las fresas porque son frutas de temporada y su combinación queda riquísima, pero, puedes utilizar las piezas que más te apetezcan o aquellas que estén a punto de pasarse.
Elaboración:
1. Primero, exprime el zumo del medio limón, pásalo por el colador y resérvalo.
2. A continuación, pela las zanahorias y la manzana, y trocéalas junto a las fresas.
3. Incorpora todos los productos en un cazo, incluido el zumo de limón, el azúcar y un poco de canela.
4. A fuego lento, ve removiendo la mezcla hasta que veas que espese y consigue la textura deseada. Normalmente, este proceso lleva 1 hora.
5. Cuando la mermelada esté lista, repártela en botes de cristal y ponlos, bien cerrados, al baño maría (tienen que quedar completamente cubiertos de agua).
6. Deja que los recipientes hiervan en el agua durante media hora y, pasado este tiempo, deja que se enfríen sin retirarlos del líquido.
7. En el caso de que quieras consumir la mermelada en el plazo de una semana, puedes omitir el proceso de esterilización del producto.
Ahora, ya podrás disfrutar de tu mermelada casera en todos tus desayunos y meriendas.
Otras formas de aprovechar la fruta madura
Una alternativa fantástica para aprovechar este alimento, y más ahora que la temporada de calor está a la vuelta de la esquina, es convertirlo en helado. En este caso solo tendrás que triturar la fruta junto a un yogur natural y llevarlo al congelador en recipientes individuales. Esta es la mejor manera de consumir helados mucho más saludables y aprovechando la comida que tenemos por casa.
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