PIZZA VEGANA

Milhojas de calabacín al estilo pizza

El calabacín es esa hortaliza que se convierte en la gran aliada para elaborar platos sencillos, sabrosos y saludables.

Milhojas de calabacín

Milhojas de calabacín Pexels

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El calabacín es un gran protagonista de la dieta mediterránea y su versatilidad hace que sea un alimento fundamental en la gastronomía. Puedes prepararlo de muchas formas, ya sea asado, al horno, guisado, crudo o en salsa. Y, además, puede combinar con otras verduras como la calabaza, la berenjena, las coles de bruselas, los pimientos, etcétera.

Su sabor suave y su agradable textura lo hacen idóneo para mayores y pequeños y su adaptabilidad y una mente creativa lo puede convertir en un entrante refrescante, en el mejor acompañamiento para una carne o un pescado, e incluso, en un plato principal.

Hoy te proponemos una receta sencilla, sabrosa y muy saludable para que sorprendas a tus comensales. Si eres un amante de la pizza, pero te apetece variar un poco la receta y consumir menos hidratos, ¡toma nota de este mil hojas de calabacín!

Receta de mil hojas de calabacín

Ingredientes para 2 personas

  • 1 o 2 calabacines
  • 250 g de salsa de tomate triturado
  • 100 g de queso mozzarella
  • 100 g de pavo o jamón York
  • 1 cucharada de orégano
  • 1 cucharada de AOVE

Modo de elaboración

- Engrasa todas las secciones del molde con un pincel untado en AVOE.

- Precalienta el horno a 200º C.

- Corta el calabacín en rodajas de medio centímetro.

- Coloca en cada sección del molde una rodaja de calabacín; a continuación, esparce una cucharada de tomate. Sobre ella, coloca una capa de pavo o jamón York, al gusto.

- Cubre con queso mozzarella, sazona con orégano y ¡la primera capa ya está lista!

- Repite todas las veces que te permita el molde para conseguir varios pisos.

- Hornea a 200 °C durante 15 minutos y ¡voilà! Milhojas de calabacín listo para servir.

Las ventajas del calabacín no se centran exclusivamente en su versatilidad, ni en su sabor, ni tan solo en su precio, dado que es una fruta de temporada (necesita climas calurosos para crecer y los meses en los que más se cultiva en España es junio, julio, agosto y, algo menos, en septiembre). Lo que hace ideal al calabacín para incorporarlo de forma recurrente a nuestra dieta son sus propiedades nutritivas.

Propiedades nutritivas del calabacín

El calabacín es una hortaliza cuya composición es 95% de agua, característica que la convierte en un alimento poco calórico y diurético. El resto de su composición son vitaminas A, B, C, D; minerales, que lo convierten en una gran fuente de antioxidantes, y pectina, celulosa y Omega 3, que reducen los radicales libres.

Beneficios del calabacín para la salud

- Sirve para adelgazar: Al tratarse de una hortaliza con gran aporte de agua y de fibra, el calabacín cuenta con muy pocas calorías y su ingesta provoca saciedad y disminuye el apetito.

- Reduce el colesterol: sus propiedades antioxidantes reducen el colesterol malo y contrarresta el riesgo de arteriosclerosis.

- Cuida la salud de los huesos: Es una hortaliza rica en hierro, calcio, fósforo y magnesio.

- Controla la presión arterial: El calabacín proporciona una gran cantidad de potasio y magnesio, dos minerales que permiten una mejor distribución de líquidos corporales y regula la tensión arterial, reduciendo la incidencia de infarto agudo de miocardio y ayudando a combatir la hipertensión.

- Favorece la flora intestinal: El calabacín cuenta con un buen aporte de fibra, por lo que ayuda a las personas que tienen problemas digestivos o intestinales como la gastritis y el estreñimiento.

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