Los gestos de cariño de la princesa Leonor con sus abuelos, la reina Sofía, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz, en la Confirmación de la infanta Sofía

La infanta Sofía ha vivido este jueves uno de los días más especiales de su vida. Al igual que su hermana la princesa Leonor hace dos años, la hija menor de los reyes Felipe y Letizia ha hecho la Confirmación este jueves 25 de mayo junto a sus compañeros del colegio Santa María de Los Rosales. Una ceremonia que ha tenido lugar en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora en Aravaca, donde tanto ella como la heredera hicieron la Primera Comunión, y a la que la Familia Real llegaba luciendo la mejor de sus sonrisas minutos antes de las 12.30 horas.

Tal y como llevaba días especulándose, la infanta Sofía ha estado arropada en un momento tan importante no solo por sus padres y su hermana, sino también por la reina Sofía y por los padres de doña Letizia, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz, acompañado por su mujer Ana Togores. A diferencia de la Confirmación de Leonor, que se celebró en 2021 cuando todavía estaban vigentes las restricciones del Covid -y en la que todavía era obligatorio el uso de mascarilla- en esta ocasión la hija menor de los Reyes ha podido contar con la presencia de sus orgullosos abuelos.

Radiante con un estiloso mono en un vibrante fucsia de la firma Cayro Woman que vale 96,90 euros con detalle cut out en el abdomen, zapatos planos, cartera de mano nude y su larga melena suelta, la infanta Sofía se ha mostrado de lo más sonriente a su llegada a la parroquia, acaparando todos los flashes durante el posado familiar previo a la ceremonia.

Un posado en el que la princesa Leonor ha tenido un importante papel, al ir a buscar a la reina Sofía y a sus abuelos maternos, en un discreto segundo plano en la puerta de la iglesia, para inmortalizar este momento familiar tan especial en el que tan solo ha faltado el rey Juan Carlos, que se encuentra en Abu Dabi. La protagonista del día, Sofía, se ha situado entre la reina Emérita y su padre, mientras Leonor lo ha hecho entre su madre y sus abuelos maternos, luciendo todos la mejor de sus sonrisas ante los numerosos medios de comunicación congregados en la explanada de acceso a la parroquia.

En la misma gama cromática que la infanta Sofía, el resto de su familia, coordinados para la ocasión; Leonor, con un juvenil vestido midi en tonos frambuesa y alpargatas de cuña; la reina Letizia, con pantalones tipo palazzo en blanco, top de seda en rosa empolvado y un calzado similar al de su hija mayor; y el rey Felipe con una corbata estampada en lila. Un color que también ha elegido doña Sofía, muy elegante con una alegre blazer lavanda.

A pesar de que en los últimos días se ha asegurado que la Princesa de Asturias ejercería de madrina de su hermana en su Confirmación, a su llegada al acto se ha confirmado que Sofía estará apadrinada, al igual que Leonor en su día, por su padre.

Pero, más allá de su look, si por algo ha destacado este jueves la Princesa de Asturias ha sido por su derroche de complicidad con la reina Sofía. Pendiente en todo momento de la Emérita, Leonor se ha encargado de ir a buscar a su abuela, y a sus abuelos maternos, para que posasen para la fotografía familiar previa a la Confirmación.

Y una vez inmortalizado este momento tan especial, ha entrado a la iglesia de lo más sonriente y abrazando cariñosamente a doña Sofía, con la que mantiene una estrecha relación que hoy ha quedado más patente que nunca.

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