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VARIAS COMPLICACIONES

La modelo Claire Bridges, de 21 años, pierde ambas piernas tras contagiarse de coronavirus

Claire Bridges, que fue diagnosticada con miocarditis, derivada de la Covid-19, rabdomiolisis, cianótica, acidosis y neumonía leve, abandonó el día que cumplía 21 años el hospital donde llevaba más de dos meses ingresada.

Claire Bridges

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Carolyn Claire Bridges, una joven modelo de 21 años, ha perdido ambas piernas tras las complicaciones derivadas por contraer el coronavirus.

Desafortunadamente, la nacida en San Petesburgo, Florida, ya vino al mundo con problemas cardíacos, algo que le convertía directamente en paciente de riesgo si se contagiaba de la mencionada enfermedad.

La recién convertida en adulta en Estados Unidos llevaba ingresada en el hospital desde el pasado 16 de enero tras su positivo en coronavirus y un severo dolor en las piernas.

Pese a que estaba vacunada contra la Covid-19, la afección cardíaca congénita con la que nació hizo que en su caso la enfermedad golpeara más fuerte.

Según informó su familia a través de un GoFoundMe que abrieron para recaudar fondos, la joven fue diagnosticada con miocarditis, derivada de su contagio, rabdomiolisis, cianótica, acidosis y neumonía leve.

Claire fue ingresada directamente en la UCI, donde ya entró con respiración asistida y donde, tras lo enferma que se encontraba ya entonces, llegó a sufrir un paro cardíaco que obligó a los equipos de emergencia a realizarle maniobras de reanimación.

Tras conseguirlo, los profesionales sanitarios tomaron la decisión de amputarle las dos piernas para poder salvarle la vida y con el fin de evitar que su salud se viese empeorada.

Ahora, tras más de dos meses ingresada en el centro hospitalario de Tampa, la modelo ha abandonado las instalaciones y ha podido salir para celebrar su 21 cumpleaños.

A lo largo de estos últimos meses Bridges ha ido dejando en sus redes una cronología de cómo poco a poco se ha ido recuperando y de cómo se ha ido adaptando a esta nueva realidad a la que ahora hace frente, dejando inmortalizados, entre otras, el momento en el que por primera vez se sentó en su silla de ruedas o el ansiado momento de su regreso a casa.

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