Los bolsos de piel desgastados pueden volver a parecer recién salidos de la tienda si sigues estos pasos

Generalmente la piel de nuestros bolsos se deteriora por una falta de hidratación o por el roce. Pero tranquilo, porque pueden volver a lucir como recién salidos de la tienda. Si quieres reparar y restaurar los bolsos de piel que no son de ante, atento porque solo necesitaremos un paño y un poco de agua.

Para comenzar debemos utilizar un paño limpio, suave y a ser posible blanco para que no se produzca ninguna transferencia de color al bolso. Con el paño blanco, lo humedecemos ligeramente y lo pasamos por el bolso para eliminar la suciedad y el polvo superficial. Te recomiendo que no utilices agua en exceso al mojar el paño ya que podría dañar la piel y dejar marcas de agua. Luego espera a que se seque al aire completamente.

Si todavía quedan marcas difíciles de quitar, puedes probar a utilizar un limpiador de cuero suave y específico para el tipo de piel del bolso.

El siguiente paso será hidratar la piel para restaurar su flexibilidad y brillo y disimular las rozaduras. Para ello puedes utilizar una crema hidratante que sea bastante densa o bien algún tipo de cera específica para bolsos y calzado. A la hora de aplicarla debes utilizar un paño haciendo círculos hasta que se absorba completamente.

Si tu bolso con el desgaste de la piel también ha perdido color, puedes recuperarlo añadiendo betún o tinte para piel del tono más parecido para restaurarlo.

En cambio, si se ha deformado o aplastado al guardarlo, puede recuperar su forma rellenándolo de paños limpios o papel.

Así conseguirás que tus bolsos de piel recuperen su aspecto original.

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