APROVAR
Las 3 técnicas de estudio que funcionan para aprobar los exámenes
Si los exámenes te ponen los nervios de punta (o a tus hijos), no estás solo. Estudiar puede ser abrumador, pero con algunas técnicas bien aplicadas, puede convertirse en un proceso más llevadero y efectivo.
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La época de exámenes puede ser un periodo muy estresante, tengas las edad que tengas. Pero existen técnicas con eficiencia probada que si se aplican bien resultan muy útiles para el proceso de estudio y para aprovar los exámenes.
Aquí te comparto 3 técnicas de estudio probadas que funcionan en niños, adolescentes y adultos.
Enseña como si fueras tú el profesor
El cerebro retiene mejor cuando tiene que pensar activamente y explicar algo. Memorizar datos puede ser aburrido, pero hacer preguntas convierte el estudio en un desafío más interesante.
- Cómo aplicarlo:
Para los estudiantes: Después de estudiar un tema, imagina que debes explicarlo a un amigo que no sabe nada del tema. Pregúntate: "¿Cómo lo explicaría para que se entienda? ¿Qué es lo más importante de este tema?". Intenta responder cada pregunta si sin mirar tus apuntes.
Para las madres y padres: Si eres de los que ayuda a sus hijos en sus estudios o les pregunta la lección antes de los exámenes, pregunta cosas que requieren explicación, no solo respuestas de sí o no. Haz que tu hijo te explique el tema como si no supieras nada.
Repaso espaciado (menos es más)
Estudiar pequeñas sesiones repartidas en varios días funciona mejor que cuando pasamos cinco horas seguidas la noche antes del examen. El cerebro necesita tiempo para procesar y almacenar información.
- Cómo aplicarlo:
Para estudiantes: Planifica sesiones de estudio de 20 minutos al día, enfócate en los temas difíciles primero. Después de una semana, verás que lo que parecía complicado se vuelve más claro poco a poco. Si el examen es en dos semanas, será más fácil dedicar 20 minutos al día e ir avanzando sin tanta presión.
Para las madres y padres: Puedes ofrecer ayuda a tus hijos para crear un calendario simple de estudio (puede ser una hoja pegada en el refri). Así es más fácil visualizar lo que toca cada día y evitar acumulaciones de última hora.
Dibuja tu propio mapa mental
Hacer un mapa mental, va a convertir conceptos aburridos en algo visual y fácil de recordar. Además, usar colores y símbolos activa diferentes áreas del cerebro.
- Cómo aplicarlo:
Para los estudiantes: Coloca el tema principal en el centro de una hoja y dibuja líneas con ideas importantes, fechas, conceptos o personajes alrededor. Es recomendable usar colores para distinguir categorías o pasos.
Para las madres y padres: Involúcrate y pide a tu hijo que te muestre su mapa mental, que te lo explique como si estuviera presentando un proyecto. Esto le ayudará a consolidar lo que aprendió.
El ambiente de estudio también importa
Es muy importante asegurarnos de que el lugar donde se estudia sea tranquilo y con la menor cantidad posible de distracciones (eso incluye el móvil fuera de su alcance).
El cerebro necesita concentración para rendir al máximo. Y no olvidemos que las pausas también son muy importantes; estudiar mucho tiempo sin descansar hace que cualquier sesión se vuelva cansada e inútil.
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