Así deberíamos estar desinfectando los trapos que utilizamos para secarnos las manos en la cocina

Además de los baños, la cocina es una de las zonas de nuestro hogar donde más suciedad se acumula. Utilizamos multitud de productos así como bayetas. Estas últimas cuando están muy desgastadas y viejas, las cambiamos por otras nuevas.

Sin embargo, cuando hablamos de los trapos para secarnos las manos, nos damos cuenta de que es posible que no les prestemos la atención que de verdad merecen. Los tejidos de estos trapos, son una fuente de gérmenes y bacterias que muchas veces no terminan desinfectando por completo con un solo lavado, ya que se adhieren fuertemente a las fibras de la tela.

Estos trapos, además de utilizarlos para secarnos las manos, también los utilizamos cuando queremos limpiar pequeños restos de suciedad. Antes de saber cómo podemos desinfectarlos completamente, debemos tener en cuenta cuál es la frecuencia en la que deberíamos cambiar de trapo.

¿Cuándo debemos cambiar el trapo de la cocina para secarnos las manos?

Lo ideal sería reemplazarlo por uno limpio a los pocos días. Sí, has leído bien. Aunque creas que pueden durar bastante tiempo, si empezamos a notar humedad en ellos, lo más recomendable es cambiarlos cuanto antes. Si no pensamos poner una lavadora con trapos y toallas pronto, es aconsejable dejarlo secar por completo antes de tirarlo en el cesto de la ropa sucia.

Cómo desinfectar los trapos de cocina

Otra de las cuestiones más importantes para la completa higiene en nuestra cocina, es saber cómo desinfectar los trapos. Para hacerlo, simplemente llena un recipiente con abundante agua caliente y vierte un vaso de vinagre blanco.

Las propiedades del vinagre blanco no solo eliminarán de forma efectiva todos los gérmenes, sino que además hará que los olores desagradables desaparezcan más fácilmente.

Después, deja sumergidos los trapos en esta solución un tiempo aproximado de 10 minutos, y después escúrrelo hasta retirar todo el exceso de la solución y humedad. A continuación, mételos en la lavadora junto a otras toallas y paños de limpieza.

Por último, sin necesidad de utilizar suavizante, programa la lavadora en un ciclo de 60 grados. De esta forma, nuestros trapos de cocina para secarnos las manos habrán quedado completamente desinfectados.

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