Limpieza y desinfección
Así debes limpiar tu máquina de aire acondicionado antes de ponerla en marcha
Estos son los pasos claves que debes dar para limpiar y desinfectar tu máquina de aire acondicionado antes de ponerla en funcionamiento.
Publicidad
No, no es arrancar y ya está. En tu sacrosanta máquina de aire acondicionado se han ido acumulando “bichitos” a lo largo del tiempo en que ha estado en reposo y si algo no queremos este año es más bichitos, ¿verdad?
No, así que vamos a ponernos manos a la obra, y sin prisas, que una limpieza a fondo lleva su tiempo porque a menudo limpiamos solamente los filtros, pero para una correcta puesta a punto hay otros elementos que deberemos limpiar. Lo primero desenchufa la máquina si es que no lo está, que no queremos disgustos.
Una vez el aparato desenchufado de la corriente eléctrica, lo primero, revisa los cables de la instalación para comprobar que no se han desconectado y que no han sufrido ningún daño durante el periodo de apagado. Mira también, si te es posible, las tuberías de la unidad exterior. Esto solo si es posible, si vas a tener que hacer equilibrios en la ventana, pasamos de esta fase.
Paso dos, limpiar: tu aire acondicionado tiene una máquina dentro y una fuera, se deberían limpiar las dos, siempre y cuando sea posible. En la unidad exterior, al estar fuera, se acumulan todo tipo de suciedades: tierra, hojas… todo esto disminuye la capacidad de tu máquina e influye negativamente en el flujo de aire.
Una vez que ya has limpiado la máquina de fuera, toca la de dentro de casa. Lo primero que debes hacer es seleccionar con el mando a distancia el modo de funcionamiento ventilador. Déjalo activado media hora aproximadamente. Esto ayudará a eliminar el polvo y la suciedad que se haya podido acumular en las aspas.
También tienes que limpiar el condensador de la máquina: el evaporador y el condensador acumulan suciedad durante el tiempo que no están funcionando y todo esto reduce la capacidad de absorber calor.
Los filtros necesitan una limpieza a conciencia porque es una de las partes de la máquina que, de estar sucia, sí que penaliza significativamente la eficiencia del sistema. Y no solo eso: reemplazar un filtro sucio por uno limpio reduce el consumo de energía entre un 5% y un 15%.
Ojo, que algunos tipos de filtros son reutilizables mientras que otros deben ser reemplazados. En el caso de que el tuyo sea de los primeros, simplemente sácalo, ponlos en agua jabonosa templada un rato. Si ves que hay suciedad que no se va, frótalos con las manos suavemente. Ojo, no conviene que utilices productos abrasivos ni cepillos de cerdas duras. Una vez limpios, déjalos escurrir hasta que estén completamente secos, que es cuando podrás volver a colocarlos.
¿Y qué pasa si los has limpiado pero al encender la máquina el aire huele mal? Esto se debe a los hongos que pueden acumularse en el sistema: en ese caso te conviene aplicar a los filtros un producto desinfectante adaptado a ellos.
Si sigues estos pasos, verás que tu máquina de aire acondicionado enfriará mejor y durará más tiempo.
Publicidad