Blue Monday: 3 razones por las que hoy no es el día más triste del año

El tercer lunes de enero es mundialmente conocido como Blue Monday -Lunes Azul en español-. Este término señala en el calendario el día más triste del año y así lo hemos asumido todos y todas desde hace más de 15 años. Pero, ¿realmente este 17 de enero va a ser el día más triste de este 2022?

El Coronavirus y todo lo que la pandemia ha conllevado a nuestra vida hace pensar en que este tercer lunes del año no tiene nada de malo. Hemos estado encerrados en casa, nos han limitado los encuentros sociales, hemos vivido toques de queda nocturnos, familiares y conocidos han muerto por Covid-19… ¿De verdad un lunes cualquiera puede ser peor que todo esto?

¿Qué es el Blue Monday?

El famoso concepto de Blue Monday nació el año 2005 como parte de una campaña publicitaria de la agencia de viajes Sky Travel. Esta empresa pidió al doctor Cliff Arnal, profesor del Centro De Aprendizaje de Lifelong -adjunto a la Universidad de Cardiff- que elaborara una ecuación matemática para determinar cuál era el día más triste del año. Una vez tuvo el resultado, la empresa lo difundió a través de un comunicado de prensa, a modo acción publicitaria.

En la fórmula original aparecen variables como el tiempo de viaje, los retrasos, las horas de sueño o el tiempo dedicado a actividades culturales. Aunque en 2009 se actualizó con otras variables más concretas como el tiempo que se tarda en desistir de los propósitos de año nuevo, el sueldo, las deudas o la necesidad de “hacer algo”.

Muchos científicos han tachado el Blue Monday de "farsa" y han afirmado que se trata pseudociencia, ya que, a pesar de presentarse a modo de fórmula, no es compatible con el método científico. Sus parámetros son totalmente arbitrarios e imposibles de cuantificar, además, Arnal no propuso unidades de medida para cada uno de ellos.

El neurocientífico Dean Burnet, también de la Universidad de Cardiff, fue uno de los primeros en desmentir esta teoría.

Aun así, el término ha ido cogiendo fuerza en los últimos años y se utiliza, sobre todo, para campañas publicitarias que inciten al consumo.

Razones por las que hoy no es el día más triste del año

Realmente, que el tercer lunes de enero sea el día más triste del año dependerá de lo que le pase a cada persona. Si justo este día consigues el trabajo de tu vida, seguro que de triste no tendrá nada y desbordarás alegría. Pero, por lo contrario, si este lunes muere un familiar tuyo o tu pareja rompe contigo, verdaderamente será el peor día del año.

Haber dejado atrás las Navidades, haber gastado mucho en regalos -y en las rebajas- y el mal tiempo que caracteriza esta época, son solo añadidos que pueden restar optimismo a la hora de afrontar situaciones difíciles.

Pero como sociedad, este tercer lunes de enero de 2022 tenemos varias razones para sonreír. Las exponemos:

1. Se acerca el fin de la pandemia

Que la variante dominante de Coronavirus sea la Ómicron es en sí una buena noticia. A pesar de ser altamente infecciosa, supone un menor riesgo de hospitalización y fallecimiento. Además, está demostrado que la vacunación ha ayudado a que esta sexta ola no sea tan grave.

Pero la noticia que realmente tiene que alegrarnos a todos es que hay varios científicos que ya vislumbran el fin de la pandemia. Adolfo García Sastre, virólogo y director del Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes del Hospital Monte Sinaí de Nueva York, afirma que “el Covid ya ha acabado” y que “nos hemos quedado con una cosa distinta”.

Varios expertos apuntan que este 2022 el Coronavirus acabará siendo un simple catarro con tan solo algunas complicaciones en casos concretos. Estas afirmaciones nos llenan de esperanza, después de dos años sin ver una salida.

2. Crece la economía mundial

A pesar de que en 2021 la pandemia no dio tregua, la economía mundial continuó recuperándose y creció aproximadamente un 5,9 %, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Tras la recesión que sufrió el planeta ante la llegada del Covid-19, la economía ha vivido un buen año gracias a los paquetes de ayuda de los gobiernos y los bancos centrales. También gracias a la vacunación, que ha permitido la reapertura de sectores muy afectados por las restricciones, como el del transporte, el turismo o el ocio nocturno.

Según las predicciones del FMI, 2022 también será un buen año, aunque con un crecimiento menor al del curso que acabamos de cerrar.

3. Hemos frenado las emisiones de gases de efecto invernadero

A pesar de que queda mucho trabajo por hacer en este ámbito, las medidas aplicadas en los últimos años para frenar el cambio climático han conseguido reducir las emisiones de gases invernadero a nivel mundial, Ahora, el calentamiento global esperando para 2100 ya no es de 4 o 5 grados, sino de 3.

Este progreso nos ayuda creer que no todo está perdido, aunque aún estamos lejos de los objetivos que pide la ciencia para salvar el planeta.

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