Cómo afecta a mi dinero la inflación actual

El Banco Central Europeo define inflación como el incremento generalizado de los precios de los bienes y servicios, que origina una disminución del valor de la moneda con el tiempo.

La inflación no afecta a todos los productos y servicios por igual. Dependiendo del peso del bien o servicio afecta de mayor forma a este índice. Por ejemplo, la electricidad tiene mayor peso y afecta más a la inflación que el precio de un alimento como los huevos.

¿Cómo se calcula la inflación?

Para calcular la inflación se tiene en cuenta el valor monetario de:

• Bienes de consumo diario (alimentos, gasolina, etc.)
• Bienes de consumo duradero (ropa, electrodomésticos, etc.)
• Servicios (alquileres, seguros, etc.)

¿Cómo va a afectar la inflación al dinero del hogar?

Cuando escuchamos que hay inflación significa que los precios han subido. A la práctica esto significa que con el mismo dinero podemos llegar a comprar menos cosas que hace un año.

Por ejemplo, si hace el año pasado con 50 € hacíamos la compra semanal para toda la familia, ahora no conseguimos bajar la compra semanal de 100 €. Por tanto, la inflación hace que nuestro dinero cada vez valga menos: si la inflación es muy elevada, estaremos perdiendo mucho dinero.

¿Qué podemos hacer para que la inflación nos afecte lo menos posible?

1. Haz un presupuesto y reorganiza los gastos.

2. Invierte lo que tengas en el banco para que pierda el menos valor posible.

3. Controla tus gastos al máximo.

¿La inflación es buena o mala para nosotros?

La inflación está en todos los países y si no hubiera inflación entraríamos en deflación, que es lo contrario: una disminución generalizada de los precios de bienes y servicios que reduciría el crecimiento económico del país.

Por eso, los bancos centrales siempre intentan que haya algo de inflación para que el país siga creciendo, lo que a nosotros nos afecta de forma positiva.

Aún así, ante situaciones de subidas repentinas de precio por ciertas situaciones especiales, como las actuales, con un incremento en el precio del gas, de la luz, etc. nos pueden afectar de forma negativa. Notamos un cambio muy brusco en nuestra economía y nuestro poder adquisitivo se ve afectado de forma importante.

En resumen, controlar y proteger nuestro dinero, es la mejor solución.

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