ALIMENTACIÓN
Cómo combatir la pérdida de apetito en verano
Con la llegada del verano llega también, en ocasiones, la falta de apetito. Pero, ¿a qué se debe este fenómeno? Te lo contamos.
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Las altas temperaturas también tienen un efecto en nuestra ingesta de alimentos. Muchas personas sienten una reducción del apetito, sobre todo los niños y las personas de edad avanzada. Para evitar que esta inapetencia sea negativa, conviene seguir unas pautas que nos ayudarán a mantenernos sanos durante el verano.
Los profesionales de la empresa de salud y bienestar Juice Plus+ nos muestra las razones de la falta de apetito estival y nos enseña a combatir este fenómeno con una serie de consejos nutricionales.
¿Por qué tengo menos hambre en verano?
Una de las causas más habituales de esta pérdida de apetito la encontramos en la subida de las temperaturas. “Durante los meses más fríos, nuestro cuerpo requiere un mayor aporte de alimentos para llevar a cabo la termogénesis (aumento de la temperatura corporal). Sin embargo, con la llegada del calor, el cuerpo no necesita invertir tanta energía para regular su temperatura y, por lo tanto, requiere de un menor aporte calórico”, explica el equipo de nutrición de Juice Plus+.
Otro de los motivos de esta inapetencia lo hallamos en el aumento de nuestro tiempo de ocio y las vacaciones. “Durante esta época del año somos más propensos a pasar más tiempo fuera de casa, lo que nos lleva a romper con la rutina y algunos de nuestros hábitos”, señalan. “Las comidas fuera se vuelven más habituales, así como el aporte de calorías con las cervezas, sangrías, helados o comidas más copiosas ricas en aceites y grasas, lo que se traduce en que la inapetencia estival no siempre implica una pérdida de peso”.
¿Cómo puedo combatir la inapetencia estival?
Ante esta situación, te presentamos una serie de consejos que puedes implementar este verano:
1. Hidrátate correctamente
Durante los meses de verano nuestra sudoración es más elevada y, por tanto, también se produce una mayor pérdida de líquidos. Tal y como destacan los profesionales de Juice Plus+, nuestro cuerpo está compuesto por casi tres cuartas partes de agua, la cual, interviene en diversos procesos como la digestión, la regulación de la temperatura y posibilita el trasporte de nutrientes. “Por ello, la ingesta de líquidos, al igual que una buena hidratación, resultan fundamentales”. Si el agua te aburre, también puedes incluir a tu dieta helados caseros, tés fríos o smoothies.
2. Apuesta por recetas refrescantes
Es cierto que con el calor tenemos menos ganas de consumir comidas sólidas y tendemos a recurrir a alimentos más ligeros. Esto está bien, siempre y cuando el bocado sea saludable. “Las frutas y verduras de temporada (melocotones, albaricoques, ciruelas, cerezas, sandía, melón, tomates, calabacines, berenjenas o la lechuga) pueden convertise en nuestros mejores aliados estivales gracias a su capacidad saciante y a su alto contenido en agua, vitaminas, minerales, antioxidantes naturales y fibra”. Y, además, resultan de lo más refrescantes.
3. Come legumbres
A pesar de que solemos asociar este grupo de alimentos con el frío y los platos de cuchara, las legumbres también son para el verano. “No debemos prescindir de ellas durante estos meses, ya que poseen un alto valor nutricional. Podemos comerlas en forma de ensaladas junto con vegetales y añadir, además, un aporte proteico en forma de salmón ahumado, bonito o langostinos”.
4. Cámbiate al aperitivo saludable
Se acabaron las patatas fritas y los revueltos. Las vacaciones no pueden convertirse en una excusa para descuidar nuestra salud. Para engañar al estómago entre comida y comida hay opciones más nutritivas. “Llevar siempre contigo fruta fresca, frutos secos o barritas nutritivas, puede ayudarte a evitar la ingesta de alimentos procesados”, recomiendan desde Juice Plus+.
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