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¿Cómo lavar las prendas de seda en casa para que no se estropeen?

A la hora de lavar prendas de seda hay que tener mucho cuidado ya que es un tejido delicado que se puede dañar muy fácilmente. Por ello, debemos lavarlas a mano con unos sencillos pasos que dejarán tus prendas de seda limpias y cuidadas como el primer día.

Una mujer con una camisa de seda

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La seda es un tejido delicado que requiere cuidados especiales para evitar que se estropee. Por ello, lo mejor es lavarla a mano en casa y asegurarnos de que no va a sufrir daños.

Es importante seguir las instrucciones del fabricante de la prenda, que podemos ver en la etiqueta. Algunas prendas se seda pueden lavarse a mano, pero otras tienen que limpiarse en seco, por lo que debemos llevarlas a una tintorería.

De igual forma, la seda es un tejido delicado que se puede dañar fácilmente con el calor, por lo que es mejor lavarla siempre a mano con agua fría. No debemos de lavar nunca la seda en la lavadora aunque esta tenga un programa para prendas delicadas, porque se puede llegar a dañar el tejido y no volverlo a recuperar.

A continuación, te damos algunos sencillos consejos para lavar tus prendas de seda, dejarlas intactas y prolongar su vida útil.

Lavar ropa de seda
Lavar ropa de seda | iStock

En primer lugar, mete la prenda en un cuenco con agua fría. A continuación, añade un poco de detergente suave para prendas delicadas. Este tipo de detergentes están formulados específicamente para no dañar las fibras de la seda ni los colores. Lo mejor es evitar usar detergentes fuertes, ya que podrían dañar el tejido.

Luego, sumerge la prenda en el agua y deja que repose durante unos minutos. A la vez, mueve la prenda suavemente para que el detergente actúe sobre la suciedad. No dejes la prenda en remojo durante mucho tiempo, pues se podría estropear.

Por último, enjuaga el detergente con agua fría hasta que el agua salga limpia y luego escúrrela con cuidado sin retorcerla para evitar que se deteriore. Es importante que no queden restos de detergente para mantener el cuidado de la prenda.

A la hora del secado, puedes colocarla sobre una toalla y estirarla suavemente sobre una superficie plana. También puedes colgarla en una percha de un material suave, como madera o plástico, para que no se enganche en la tela. En cualquier caso, evita que la prenda se exponga a la luz solar directa, ya que podría decolorarla.

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