COREGASM
Cómo tener un orgasmo mientras haces abdominales
¡Se puede! Si se entrena frecuentemente es posible llegar al orgasmo haciendo ejercicio, ya que el “chute” de endorfinas, junto a la tensión del abdomen, estimulan el clítoris.
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Ya hemos dejado claro en numerosas ocasiones que el orgasmo se puede llegar a alcanzar estimulando diferentes partes del cuerpo. De hecho, hay quienes llegan al orgasmo cuando les lavan la cabeza, a través de una fantasía erótica, con el roce de las cuerdas como puede pasar con el shibari, con la vibración, con el roce de la costura de un pantalón…, así que por qué no podría ser haciendo ejercicio, en concreto, haciendo abdominales.
Se le llama coreorgasmo o abdorgasmo, ya que lo que se estimula es la musculatura del core o de los abdominales. Se han realizado muchos estudios sobre el tema desde el siglo XX. Alfred Kinsey, investigador al que llamaron en numerosas ocasiones “el padre de la revolución sexual” por varios de los estudios que realizó sobre la orientación sexual, ya decía que el 5% de las mujeres que participaron en sus encuestas habían reconocido haber alcanzado el orgasmo cuando hacían ejercicio.
En 2011, el Centro de Fomento de la Salud Sexual de la Universidad de Indiana en EE.UU. publicó un estudio al que llamó Sexual and Relationship Therapy en el que participaron 530 personas de entre 18 y 63 años. Con este estudio llegaron a la conclusión que solo las mujeres podían alcanzar este tipo de orgasmo por la disposición de su cuerpo.
Algunos de los datos más sorprendentes de este estudio fueron que entre todos los ejercicios posibles para conseguir este tipo de orgasmo, los abdominales eran el más repetido. Según este estudio el 51% de las mujeres encuestadas lo alcanzó mediante los abdominales, el 27% haciendo pesas, el 20% con yoga, 16% en spinning, 13% corriendo y un 10% andando.
Lo que está claro es que no todas son capaces de alcanzarlo, pero las que más probabilidades pueden llegar a tener sin duda son aquellas que tienen un suelo pélvico sano y en buena forma. Hay diferentes formas de conseguir tenerlo así, aunque lo mejor es que una profesional te guíe en tu aprendizaje y que no intentes hacer cosas por tu cuenta viendo vídeos que más que ayudarte, te pueden dañar el suelo pélvico.
Ahora bien, lo que sí te podemos decir es que lo más eficaz son los abdominales que se realizan tumbada, elevando las rodillas hacia el pecho, ya que producen una contracción de la musculatura del suelo pélvico produciendo una suave estimulación del clítoris.
También se pueden alcanzar con los abdominales tradicionales, lo que se conoce como crunch. El truco para intentar conseguirlo es mantener las piernas cruzadas y ligeramente en tensión durante cada elevación del tronco. La idea es que se produzca una contracción y una relajación de los músculos pélvicos y abdominales centrales.
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