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Cómo tratar y prevenir un herpes labial

Hablamos con Sandra Alexandre e Ingrid Fontanals, especialistas en psiconeuroimmunòloga clínica, sobre los contagios por herpes simple.

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En el mundo existen dos tipos de personas: las que sufren de herpes labial y las que no. Básicamente, estas calenturas solo las padecen aquellas personas que han sido infectadas por el virus herpes simple (VHS), que no tiene cura.

Después de la primera infección, el virus queda latente en el cuerpo y cada cierto tiempo, coincidiendo con bajadas de defensas, el estrés o un aumento de la exposición solar, se reactiva provocando sensación de escozor en el labio. Es justo en ese momento, cuando el herpes se comienza a manifestar, cuando una persona puede contagiar a otra y sentenciarla a tener, de por vida, calenturas. Por eso, es muy importante identificar esta patología y prevenir su contagio.

¿Cómo actuar ante un herpes labial?

Existen estudios elaborados por empresas farmacéuticas que afirman que, en España, aproximadamente, 7 de cada 10 personas están infectadas por este virus, aunque hay muchas que ni siquiera lo saben. Por lo tanto, es muy probable que tú acabes sufriendo una calentura en algún momento.

Para que tengas las herramientas necesarias para actuar cuando llegue el momento, en NovaMás hemos hablado con Sandra Alexandre e Ingrid Fontanals, especialistas en psiconeuroimmunòloga clínica, del centro PNI Lleida.

Ellas nos explican que durante los días previos a la salida del herpes ya podemos notar dónde aparecerá, ya que ciertos cambios físicos nos lo indican: un enrojecimiento y endurecimiento de la piel; escozor o ardor y una mayor sensibilidad al tacto.

"Aquí ya podemos empezar a tomar antivirales, como la l-lisina o el reishi, y, a nivel tópico, aplicar aceite de árbol de té, sangre de drago y mantener la zona hidratada con un buen bálsamo labial", recomiendan Sandra e Ingrid.

En cuanto a la convivencia con la pareja o la familia, las expertas recuerdan que "no es aconsejable compartir cubiertos, beber del mismo recipiente ni dar besos mientras tenemos cualquier manifestación del herpes, a pesar de que sea pequeña o esté en el tramo final de la curación".

¿Es posible evitar la llaga?

Esta es la gran pregunta que nos hacemos todos cuando comenzamos a notar el entumecimiento del labio. Y lo cierto es que es muy difícil evitar que la calentura acabe apareciendo. Pero, según indican las expertas, "si lo empezamos a tratar, justo cuando lo empezamos a intuir, puede ser que evitemos que avance, de forma que no aparezca más que este pequeño síntoma de ardor o escozor que hemos notado".

Además de tratarlo, también podemos ingerir productos naturales que nos ayuden a mejorar el sistema inmune, para que este sea capaz de combatir el virus eficazmente y prevenirlo. Las expertas proponen hongos (en concreto cordyceps sinensis, coriolus versicolor y shiitake), zinc, vitamina C y equinácea.

Y para combatir la replicación del virus, también podemos comer alimentos ricos en proteína como carne, huevos, algunos pescados azules, el cacao o los pistachos, donde encontramos la L-Lisina de forma natural. También resulta eficaz el ajo y la cúrcuma. Y hay que vigilar con la mayoría de frutos secos, porque estimulan la actividad del herpes simple.

¿Puede no ser un herpes?

Desde PNI Lleida nos recuerdan que "existen otras patologías que podrían inducir a error" y hacernos pensar que tenemos un herpes labial cuando no los es. Las famosas calenturas se podrían confundir con un eritema exudativo multiforme o con herpes zoster.

Según el artículo 'Diagnóstico diferencial de patologías de la mucosa oral' de Wolfgang Bengel, estas son las características que los diferencian:

Herpes labial