CONSEJOS DE UNA EXPERTA
Una dentista explica qué debes hacer si tu hijo pierde un diente por un golpe
Que tu hijo caiga y pierda un diente puede ser angustiante para él y un buen susto para quienes están a su alrededor. Por eso, hay que mantener la calma y seguir los pasos que indican especialistas como la Dra. Almudena Herraiz, ortodoncista.
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Es de lo más normal que los niños jueguen, corran y salten. Sin embargo, en una de estas, pueden caer, hacerse daño y darnos un buen susto. Si como consecuencia de la caída, un diente sale por los aires, eso le va a doler y puede salir bastante sangre. Después del impacto inicial, es importante mantener la calma, actuar rápidamente y recuperar el diente lo antes posible porque en algunos casos será posible reimplantarlo.
Para recuperarlo, hay que tener en cuenta una serie de aspectos para no dañar la pieza dental. La Dra. Almudena Herraiz (@janerherraizortodoncia en Instagram), ortodoncista con clínica en Barcelona, nos explica cómo actuar en una situación como esta. Espóiler: la rapidez es la clave.
Hay que recuperar el diente
Si en vez de partirse, el diente sale despedido, la Dra. Herraiz detalla que lo primero que se debe hacer es limpiar la sangre del hueco donde estaba el diente, poner una gasa pequeña húmeda y que el niño muerda, pero sin apretar demasiado. A continuación, pon un trapo o una gasa con hielo o muy fría alrededor de la barbilla y las mejillas para que no la zona no se inflame.
Mientras tanto, se puede aprovechar para hacer un poco de investigación y buscar el diente perdido: mira al suelo y anda con cuidado para evitar pisarlo y que se rompa. Si tienes la suerte de encontrarlo, es muy importante que lo cojas por la parte blanca (la corona del diente) y nunca por la raíz. Si ves que el diente está sucio, lo puedes lavar bajo un chorro de agua fría durante 10 segundos.
A partir de aquí se puede actuar de dos formas. Por un lado, la ortodoncista cuenta que puedes probar de recolocar el diente tú misma (si crees que no habrá riesgo de dañar la zona) quitando la gasa y poniendo la pieza dental en su sitio: "Lo colocamos fijamente y luego, con una gasa, podemos morderlo suavecito", dice la doctora. "Todavía hay sangrado activo, no hay coágulo y entonces va a ser más fácil que el diente entre y se vuelva a coger al hueso", añade. Después, ve rápidamente al dentista para que le eche un ojo y revise que todo está correcto.
La otra opción es ir directamente al dentista y que sea él el que coloque el diente. Para llevarlo de tu casa a la consulta, lávalo igualmente con agua fría durante 10 segundo y ponlo en un vaso de leche de vaca fría. Allí se conservará un tiempo máximo de entre 4 y 6 horas. Aun así, la experta recomienda ir al especialista lo antes posible. Una vez en la consulta, el dentista intentará ponerlo en su sitio y "puede que tengamos la suerte de que vuelva a integrar el diente y consigamos que el diente quede en boca y recuperemos ese diente". Cumplido el objetivo, la Dra. Herraiz avisa que seguramente habrá que hacer "tratamientos posteriores para que aguante, pero oye, hemos salvado un diente".
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