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Derechos de las embarazadas cuando van a parir: ¿Pueden pedir lo que quieran en el plan de parto?

El conocido plan de parto es un documento legal en el que la mujer embarazada puede expresar su voluntad respecto a diferentes intervenciones, actuaciones o situaciones del parto.

Mujer embarazada

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El plan de parto debería ser elaborado durante el embarazo, donde la mujer se toma tiempo para informarse adecuadamente sobre todos los aspectos que envuelven al parto y nacimiento de su bebé.

Este documento está respaldado por la Ley de Autonomía del paciente, donde se define el consentimiento informado como "la conformidad libre, voluntaria y consciente de un paciente, manifestada en el pleno uso de sus facultades después de recibir la información adecuada, para que tenga lugar una actuación que afecta a su salud".

Las decisiones informadas de la mujer embarazada han de ser respetadas siempre por el personal sanitario, venga en forma de "consentimiento informado", "plan de parto" o "petición verbal".

¿Cuáles son los derechos de una mujer durante el parto?

Existen 7 derechos de la mujer durante el parto que deben respetarse. Son los siguientes:

  • Derecho a la información: la mujer embarazada tiene derecho a conocer toda la información disponible sobre su salud y sobre las intervenciones o actuaciones que vayan a realizarse. Esto incluye la justificación de realizar una intervención, posibles alternativas, los riesgos y las consecuencias.
  • Derecho a decidir: toda persona, incluido una mujer embarazada de parto, tiene derecho a decidir sobre su cuerpo y su salud. Por lo tanto, cualquier intervención que vaya a realizarse a una gestante que está de parto, debe ir acompañada de información clara y completa y el consentimiento, verbal o escrito, por parte de la mujer.

    Por ejemplo, si es necesario realizar una episiotomía, la mujer debería ser previamente informada y dar su consentimiento.

  • Derecho a elegir: la mujer embarazada tiene derecho a recibir todas las alternativas posibles ante una situación, y decidir la que desea.

    Por ejemplo, la mujer tiene derecho a elegir en qué posición quiere parir.

Una mujer en el paritorio
Una mujer en el paritorio | iStock
  • Derecho a la intimidad: no podemos olvidar que un parto forma parte de la vida sexual de la mujer, por lo que cobra aún más relevancia la necesidad de proteger su intimidad. Con esto, nos referimos a una intimidad tanto física (debería ser la mínima como para acompañar y asistir a la mujer durante su parto), como moral (haciendo referencia a la confidencialidad de los datos clínicos de la mujer).
  • Derecho a la dignidad: este derecho hace referencia a las actividades docentes en un hospital universitario. Y es que, no deberían realizarse actuaciones con un fin de docencia si no son necesarias y no están justificadas en el contexto del desarrollo del parto, y por supuesto, nunca sin la información y consentimiento por parte de la mujer.
  • Derecho a identificar a los asistentes: la mujer embarazada tiene derecho a conocer la identidad y categoría profesional de cada persona que interviene o está presente durante su parto.
  • Derechos del recién nacido: todo menor ingresado en un hospital, y esto incluye por ejemplo a los recién nacidos ingresados en neonatos, tiene derecho "a estar acompañado de sus padres o de la persona que lo sustituya, el mayor tiempo posible durante su permanencia en el hospital no como espectadores pasivos, sino como elementos activos de la vida hospitalaria".

Conociendo cuáles son tus derechos, habiendo realizado una preparación al parto impartida por una matrona (es el único profesional sanitario capacitado y con competencias para realizar esta actividad), y habiéndote informado de las posibilidades reales que existen en tu hospital (personal, infraestructuras, recursos disponibles…), te animo a redactar tu plan de parto y entregarlo al equipo que te acompañará en el nacimiento de tu bebé.

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