Glòria Serra: "Las empresas dirigidas por mujeres tienen más éxito que las de los hombres hasta que cumplen los 35 y quieren ser madres"

Casi la mitad de los emprendedores son mujeres: alrededor de 650.000. No solo eso, sino que las empresas dirigidas por mujeres terminan siendo, en general, más competitivas que aquellas que son gestionadas por hombres.

La periodista Glòria Serra enumera una serie de datos sin duda interesantes: además de ser más exitosas, las estadísticas indican que las empresas de mujeres suelen ser más innovadoras que las dirigidas por hombres, quizá porque las responsables sepan aportar puntos de vista y estrategias diferentes de las que imperan en el mercado, logrando diferenciarlas.

Los bancos suelen conceder menos créditos a las empresas dirigidas por mujeres

Otro factor positivo a tener en cuenta son los estudios de las mujeres empresarias. Los datos apuntan a que suelen estar más preparadas que sus homólogos varones, aportando un indudable valor añadido a su gestión.

A pesar de todos estos aspectos positivos, las emprendedoras siguen estando en total desventaja. En primer lugar, las mujeres que gestionan empresas tienden a ser muy jóvenes, principalmente ejecutivas de 25 a 35 años. ¿Por qué ocurre este fenómeno?

Podría parecer un dato baladí, pero lo cierto es que resume perfectamente uno de los principales problemas a los que se enfrentan las mujeres empresarias: a partir de los 35 comienzan a querer ser madres y entra en juego la conciliación, una palabra que a día de hoy continúa conjugándose en femenino. Esto provoca que, en muchos casos, las empresas terminen cerrando o yendo mal.

Otro obstáculo que resulta impactante se presenta cuando una empresa dirigida por una mujer se plantea pedir dinero a una entidad bancaria. Los bancos suelen conceder menos créditos a las empresas dirigidas por mujeres, a pesar de que esté demostrado que son más exitosas.

Así pues, conviene realizar una profunda reflexión acerca de las dificultades añadidas que la sociedad impone a las empresarias por el mero hecho de ser mujeres. ¿Cuándo podremos disfrutar de un mercado laboral con total igualdad de condiciones para trabajadores de ambos sexos?