CONSEJO

¿Las juntas de tus azulejos están negras? El mejor producto de limpieza para que queden así de blancas

Las juntas de los azulejos son el típico sitio que no limpiamos a menudo, y adquieren un tono cada vez más oscuro por la acumulación de suciedad o humedad. Aunque no es algo que debamos hacer cada vez que hagamos una limpieza a fondo, tampoco debemos dejar que se junte demasiada suciedad. Hay dos métodos caseros muy fáciles para limpiarlas y que queden blancas de nuevo.

Lavando las juntas de las baldosas de la pared del baño

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A pesar de que es importante hacer una buena limpieza general en el baño o la cocina, hay ciertas zonas que no siempre se limpian porque son más invisibles o no le prestamos tanta atención. Este es el caso de las juntas de los azulejos, que con la humedad o la propia suciedad del baño adquieren un color más oscuro. Si bien es cierto que este elemento tarda más en ensuciarse que otros, es importante limpiarlo y evitar que se acumule demasiada suciedad.

Lo cierto es que la mejor manera de limpiar estas juntas es con un producto que suele estar en casa, la pasta de dientes. Aunque suene un poco raro es una opción cómoda y efectiva de devolverle el color y el brillo original a la silicona que junta las baldosas y azulejos. Esto ocurre porque la pasta de dientes suele tener, entre otros elementos que componen su fórmula blanqueadora, un bicarbonato que es muy útil para esta labor.

El método más utilizado es el de aplicar una pequeña dosis de pasta en la junta y, a continuación, frotar con un cepillo. El tiempo que se ha de emplear para limpiar estas juntas dependerá completamente del tiempo que haga que no se limpian y de la suciedad que tenga. Para terminar, solo hace falta enjuagarlo con agua fría y debería volver a su estado original.

Mujer limpiando el sueño con un trapo
Mujer limpiando el sueño con un trapo | Unsplash

Si a pesar de todo no se consigue limpiar por completo la junta, también se puede utilizar lejía diluida en agua, ya que es un poco más fuerte y es posible que sí acabe con la suciedad agarrada. Es importante utilizar el agua, puesto que la lejía es corrosiva y puede hacer daño. Por lo demás, el proceso es el mismo; frotar con el cepillo y limpiar posteriormente con agua fría. Estos dos productos están diseñados para blanquear, por lo que, después de su uso estas deberían verse como nuevas.

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