Lengua agrietada: ¿qué dice sobre tu salud?

¿Te has fijado alguna vez en las fisuras que presentan algunas lenguas? O quizá, tú misma has detectado alguna grieta en la tuya propia. Si empezamos a darle vueltas al asunto, puede que acabemos formulando todo tipo de hipótesis poco optimistas, alrededor de esta alteración de la lengua. El aspecto de una lengua fisurada puede ser alarmante e, incluso, doloroso.

No obstante, es una condición de lo más común que, por regla general, no acaba ocasionando ninguna complicación grave. De todos modos, para profundizar un poco más en el tema, en NovaMás, hemos hablado con Irene Verdugo, odontóloga y enfermera.

Aparte de ejercer, Irene difunde contenido dinámico y en clave de humor a través de sus redes, relacionado con la divulgación sanitaria bucodental. En TikTok ya cuenta con más de 67 mil seguidores.

¿Qué son las fisuras en la lengua?

La lengua fisurada es condición anatómica de la lengua de carácter benigno. Hay personas que tienen la lengua con una forma diferente a lo que estamos acostumbrados a ver, pero eso no significa que tengan una enfermedad, ni que sea malo. De hecho, es tan común que el 20-30% de la población tiene la lengua así. ¡Está considerada una variante de la normalidad!

En la superficie de este tipo de lengua se ven unas grietas que en realidad son pliegues de la misma mucosa. Estos surcos pueden ser de una profundidad y orientación variable, vertical en el dorso de la lengua y horizontal en los lados.

La lengua fisurada no es sinónimo de enfermedad. Sin embargo, se ha visto asociada a diferentes afecciones médicas, como Síndrome de Down, Síndrome de Melkersson-Rosenthal, acromegalia, Síndrome de Cowden y psoriasis, entre otras patologías.

¿Cuál puede ser el origen?

El origen de la lengua fisurada es idiopático. "Idiopático" es una palabra médica que se usa para decir, finamente, que no se sabe de dónde viene. Aunque se cree que podría existir un componente hereditario o podría ser una manifestación dermatológica de alguna de las afecciones antes mencionadas.

Ahora bien, la prevalencia de la lengua fisurada es mayor con la edad, es decir, cuanto más mayores nos hacemos, más probable es que desarrollemos estas grietas. Podría estar más presente en personas con psoriasis, diabetes e incluso en aquellas que tengan problemas con reflujo gastroesofágico o anemia.

¿Puede conllevar complicaciones graves para la salud?

La lengua fisurada per se no supone ninguna complicación grave, pero sí que puede predisponer a la persona a padecer problemas en la lengua derivados del acúmulo de comida y suciedad en la profundidad de las grietas. Como ahora dolor, inflamación, infecciones o halitosis.

Al ser una lengua tan rugosa es más complicado asegurar una buena limpieza lingual y es frecuente que se infecte por hongos. También hay que mencionar que, pese a ser una condición normal, el desconocimiento de la población sobre la lengua fisurada, hace que las personas que la tienen sufran rechazo por parte del resto.

Sonreír sacando la lengua en una foto, besarse o incluso el sexo oral, puede ser una situación incómoda para quién tiene este tipo de lengua. Por esto, es importante darle visibilidad. ¡No es una enfermedad ni es nada contagioso!

¿Existe tratamiento para eliminar las grietas?

Las grietas no son consideradas un problema médico como tal, por lo que no tienen tratamiento. Sin embargo, cuando se inflaman e infectan hay que solucionarlo. A la lengua inflamada la llamamos "glositis" y se trata con antifúngicos y corticoides tópicos.

También se pueden usar colutorios desinfectantes y, si el cuadro lo requiere, se puede realizar el tratamiento tomado vía oral.

¿Qué hábitos nos ayudan a prevenir la lengua agrietada?

Se recomienda eliminar todas aquellas sustancias que pueden ser irritantes para la mucosa oral, como el tabaco, la comida picante y muy caliente, el alcohol, incluso los colutorios a base de alcohol en su composición.

También se aconseja beber mucha agua. Asegurar una buena hidratación hará que tengamos mayor producción de saliva, que funciona protegiendo todos los tejidos de la boca. Además, si tenemos una boca bien hidratada disminuye el mal aliento.

Hay que mantener una exhaustiva higiene oral, pero no solo hablo de cepillar los dientes, también lengua. ¡Sí, la lengua se cepilla! De hecho, existen unos artilugios que se llaman raspadores linguales cuya función es la de cepillar la lengua, arrastrando células muertas, hongos, bacterias y restos de comida.

Una lengua sana es de un color rosa pálido. Por lo tanto, la mancha blanquecina que ves en medio de la lengua es suciedad y hay que eliminarla. Y por último, es recomendable seguir una dieta variada y equilibrada, rica en fruta y verdura, y asegurando un buen aporte nutricional.

¡Hay que sumarse a la tendencia del body positive reivindicando que todas las lenguas son normales, incluso la lengua fisurada!

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