MASTURBACIÓN
¿Te puedes masturbar sin manos?
Hay múltiples maneras de hacerlo. ¿Te gustaría descubrir algunas?
Publicidad
Parece que todo lo que tenga que ver con la masturbación conlleva pensar en manos o en juguetes eróticos, y esto es porque nuestro imaginario erótico se ha quedado pobre o no lo hemos cultivado. Antes de internet y del porno audiovisual, el imaginario era una de las cosas más explotadas para la masturbación y para la obtención del placer.
Nos dejábamos llevar por la imaginación para crear escenas propias y eso también se notaba en las alternativas que buscábamos para masturbarnos. Aunque sí que es cierto que las posibilidades para masturbarse sin manos son más cuando tienes vulva que cuando tienes pene, ya que la masturbación de los hombres requiere de una técnica diferente a la de las mujeres. Pero eso no quiere decir que no puedan masturbarse sin las manos, de hecho, las personas con pene también se pueden masturbar con las técnicas que os dejamos a continuación.
Definición de masturbación
Lo triste es que se siga entendiendo la masturbación como la estimulación de los genitales para llegar al orgasmo. Con todo lo negativo que alberga esta definición. Lo primero porque limita la masturbación a una zona en concreto y lo segundo porque nos une automáticamente con la idea de un final concreto y con la obligación de obtenerlo. Por eso lo primero de lo que nos tenemos que deshacer es de esta idea. Puedes disfrutar perfectamente de la masturbación sin llegar a orgasmar y puedes estimular más que tus genitales para obtener placer.
Y luego está el tema de que hay personas que por circunstancias ‘x’ de la vida no pueden utilizar sus manos para masturbarse y requieren de otras técnicas y habilidades. Y sí, ello/as también se masturban. Por eso, independientemente de los motivos que te hayan traído a interesarte por este tema, aquí te dejamos algunas sugerencias para obtener placer en la vulva o en el pene y ampliar tu imaginario erótico.
Opciones para masturbarse y/o estimularse sin manos
1. Frotar(se): Algo que aprendemos desde pequeñas. Es inevitable que la primera técnica de masturbación que aprendamos sea esta. El roce con las costuras de los pantalones, contra una almohada o algo duro… y parece que según vamos creciendo dejamos de validad esta opción para obtener placer. Incluso si tenemos pareja. Rozarnos con ella puede llegar a ser de lo más estimulante y nos olvidamos de esta posibilidad porque solo se valida la penetración con orgasmo como la definición de un encuentro satisfactorio.
2. Vibración: Ya sea de un juguete erótico o de cualquier cosa que vibre. Podemos utilizarlo sin tocarlo y ser igual de estimulante si probamos a movernos sobre él o lo dejamos quieto sobre la vulva o el pene.
3. Cuerpo: Parece que se nos olvida que no solo podemos utilizar las manos para masturbarnos, hay personas que utilizan otras partes de su cuerpo para masturbarse, a sí mismas o a sus amantes. Pies, boca, brazos, piernas, muslos… las posibilidades son tantas como las que albergue tu imaginación. Y no solo para masturbar la vulva o el pene, puedes utilizar otras partes de tu cuerpo para estimular otras zonas erógenas. Eso también es masturbarse.
4. Sentidos: También te puedes llegar a excitar activando los demás sentidos. Hay personas que llegan a sentir mucha excitación con palabras o con estímulos visuales o olfativos. Explorar esas posibilidades puede llegar a abrirte un nuevo campo de placer.
Publicidad