TIENE UN ENFISEMA PULMONAR
David Lynch necesita oxígeno y apenas puede caminar tras llevar fumando desde los 8 años: "No me arrepiento"
El director de 78 años, David Lycnh, ha compartido su delicado estado de salud después de sufrir un enfisema pulmonar a causa de su adicción al tabaco desde que era un niño.
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David Lynch es uno de los cineastas más originales de la historia reciente. Pocos como él han logrado hacer cine experimental y a la vez llegar a millones de espectadores con películas como Mulholland Drive, El hombre elefante, Terciopelo azul, Carretera perdida o su serie Twin Peaks.
Sin embargo, el director lleva años alejado de grandes proyectos salvo su breve papel como John Ford en Los Fabelman, de Steven Spielberg, ya que hace cuatro años que le diagnosticaron un enfisema pulmonar que le tiene confinado en su propia casa.
El causante fue su adicción al tabaco durante 70 años y, aunque dejó de fumar hace dos años, su estado de salud es muy delicado. Ahora, ha instado a otros a dejar de fumar también, aunque no se arrepiente de su vida como fumador.
"Fumar fue una parte muy importante de mi vida. Me encantaba el olor y el sabor del tabaco. Me encantaba encender cigarrillos. Para mí, era parte de ser pintor y cineasta", ha declarado a People, añadiendo que, eso sí, "recoges lo que siembras".
Actualmente depende de oxígeno para cualquier tarea que suponga un mayor esfuerzo que el simple hecho de caminar por una habitación.
Lynch, que comenzó a fumar a los 8 años, intentó dejarlo "muchas veces, pero cuando se puso difícil, fumaba el primer cigarrillo y era un viaje de ida al cielo", según sus palabras. Ni siquiera el enfisema fue suficiente para que dejara de fumar y tuvieron que pasar otros dos años antes de dejarlo ya que le dijeron que moría en una semana si no cortaba de raíz aquel hábito.
"Apenas podía moverme sin quedarme sin aire. Dejar de fumar era mi única opción", ha reconocido, lamentando que "es duro vivir con enfisema. Apenas puedo caminar por una habitación. Es como si estuvieras caminando con una bolsa de plástico alrededor de la cabeza".
A pesar de su dura enfermedad y que casi no puede salir de su casa, lo cual agradece ya que nunca ha sido muy social -tal y como ha reconocido-, el director no descarta rodar de forma telemática en los próximos años.
"Es un precio muy alto que pagar, pero no me arrepiento. Fue importante para mí", ha mantenido.
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