ENTREVISTA | EL ACTOR PRESENTA EN EL FESTIVAL DE MÁLAGA 'DIOSES Y PERROS'
Hugo Silva: "El mercado no está como para andar eligiendo los papeles"
El actor presenta en el Festival de Málaga su última película, la "pequeña pero muy valiente" 'Dioses y Perros', en la que se mete en la piel de un ex boxeador derrotado por la vida que carga sobre sus hombros el peso de un hermano en silla de ruedas y un amigo alcohólico al borde del desahucio. Charlamos con Hugo Silva sobre cómo es crecer en un barrio obrero, sobre su carrera y sobre la fama.
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"Creo que no hay nada estéticamente más alejado que los dioses y los perros", dice Hugo Silva confesándose "encantado" con el título de la película que presenta este martes en la sección oficial del Festival de Málaga. Aunque, para ser justos, la cinta solo muestra cómo las pulgas de la vida a veces te pueden dejar noqueado. Ni rastro del Olimpo.
Como punto de partida, en 'Dioses y Perros' veremos al actor interpretando a un ex púgil que va despejando los golpes de la realidad un poco como puede. Mientras, tendrá que cargar con un hermano en silla de ruedas y un amigo alcohólico al borde del desahucio. "Es oscura, es arriesgada, por momentos es incluso sucia. Es una película pequeña pero valiente".
El título de 'Dioses y Perros' hace también referencia a un momento de la película en el que hay una pelea "bastante dura" en la que unas mafias ponen a un pobre diablo frente a frente con un boxeador sanguinario, para así poder apostar sobre cuántos dientes le quedarán en su sitio después de la pelea o cuántos meses pasará en coma en el hospital.
En esta película el boxeo es solo una metáfora más, pero sí veremos a Hugo Silva moverse sobre el ring. "El boxeo es un deporte muy noble y una forma de canalizar el miedo y la violencia. Además es cinematográficamente interesante" dice el actor durante nuestra charla en la azotea de la terraza del Hotel Málaga Palacio, centro neurálgico de todas las entrevistas del festival.
"Nada es tan duro como lo parece"
'Dioses y Perros' está íntegramente rodada en Vallecas y en otros distritos a las afueras de Madrid. Una vida "de barrio" que Hugo Silva conoce bien, ya que nació y se crió en San Blas, zona obrera del extrarradio de la capital con una realidad social parecida. "Con este personaje me he sentido bastante cerca desde el principio, quizá porque yo también soy de un barrio. Allí nos enfrentábamos a los problemas con humor".
La película se rodó en escenarios reales. Por ejemplo la casa en la que 'Pasca' vive con su hermano discapacitado, y en la que por cierto, no funciona el elevador, convirtiendo unas pocas escaleras en las aguas del Mar Rojo y a Hugo Silva en un Moisés carcelero. "Nada es tan duro como lo parece. Reconozco que en los barrios son complicados, pero hay sitios del mundo en el que las cosas se complican un poquito más", dice recordando el tiempo que pasó viviendo en Colombia.
"No está el mercado para andar eligiendo los papeles"
Muchos siguen pensado que le sigue debiendo su fama a la televisión. Pero si esos muchos decidieran revisar la filmografía de Hugo Silva, se encontraría, con 13 películas, las dos últimas con Pedro Almodóvar y Alex de la Iglesia. "Lo que más me interesan son las historias, es la motivación. Tampoco esta el mercado para ir eligiendo, pero intento hacer las cosas que me llenan. Y en este caso es una película pequeña, pero muy muy valiente" dice al explicar que su carrera no sigue un trazo ya marcado. "Hay guiones que se me quedan en la cabeza y que casi parece que he visto la película".
La charla termina un poco antes de que el actor tenga que abandonar la tranquilidad de la planta número 15 del hotel en el que se parapetan las estrellas en Málaga. Según se abran las puertas automáticas se encontrará con chicas menos que adolescentes que sabían perfectamente quién estaba a punto de salir. "Lo bueno de esta edición es que he venido entre semana, y un martes no hay tanto jaleo", dice con esa risa del que sabe que el cariño de los fans en este festival es fervoroso y a veces, incluso agresivo.
"La fama forma parte de mi vida, y estoy bastante acostumbrado. Ya lo gestiono con mucha naturalidad". Hugo Silva dice que ese es un golpe de la realidad que sí ha sabido despejar.
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