NÚMERO DE SERIE
'American Horror Story: Hotel': un comienzo atractivo y nada decepcionante
Cada premiere de ‘American Horror Story’ es una fiesta cargada de expectación. En esta ocasión el morbo era altísimo, tras la incorporación de Lady Gaga al elenco de ‘American Horros Story’ y la marcha de Jessica Lange, estandarte y musa de Ryan Murphy durante las primeras cuatro temporadas. El primer capítulo de la quinta temporada, que registró casi 6 millones de espectadores, nos ha descubierto un hotel repleto de personajes atractivos que pueden regalarnos una de las mejores entregas en toda la historia de la saga.

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Estamos más que acostumbrados a que ‘American Horror Story’ tenga un recorrido irregular y con bastantes subidas y bajadas. El mejor ejemplo lo tenemos en la versión Circus y su resultado más vergonzoso en la denostada Coven. Sin embargo, en ‘American Horror Story: Hotel’, el discurso parece mejor hilado y menos disperso que en anteriores ediciones; hay menos amalgama de personajes y están mejor construidos.
De entre el amplio catálogo de actores, había un especial interés por Lady Gaga, en su primer papel protagonista en una serie de televisión. La excéntrica cantante da vida La Condesa, un papel hecho a medida para ella y aunque no son muchos sus minutos en pantalla, sí que están cargados de potencia visual y suponen toda una declaración de intenciones de lo que será esta nueva temporada. Más que una sustitución de Jessica Lange por Gaga, se puede hablar de un cambio de estilo, de elegir un nuevo camino que faltaba por explorar.
Aunque todavía faltan algunas estrellas por aparecer, como Angela Bassett o Evan Peters, hemos disfrutado de las grandes Kathy Bates y Sarah Paulson, impecables en sus respectivos papeles. Y nada que decir de Denis O'Hare, arrollador en su papel del travesti Liz Taylor. También ha sido un acierto de casting la participación de Wes Bentley en su papel de policía y que ya colaboró en la anterior temporada. Si de algo puede presumir la serie es de haber contado siempre con actores de primer nivel, que muchas veces han tapado los agujeros negros de guion.
Los elementos fantásticos y sobrenaturales están muy bien introducidos y como siempre van en paralelo de todo tipo de perversiones sexuales. Los huéspedes, y sobre todo el personal del Hotel Cortez, componen un mosaico muy interesante repleto de excesos, de erotismo, de decoración retro, de aire kitsch y con una dirección artística de primer nivel. En este último terreno ‘American Horror Story’ siempre ha tenido una ambientación excepcional, cuidando hasta el más mínimo detalle para que todo lo visual sea una pata fundamental en el estilo global de la ficción.
De momento, apetece y mucho ver esta nueva temporada de ‘American Horror Story’. No sabemos cómo evolucionarán los siguientes episodios (tiempo siempre hay para dinamitar la buena sensación de la premiere), pero visto lo visto, dan bastantes ganas de pasar más de una noche en este prometedor y nada decepcionante hotel.
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