NÚMERO DE SERIE
'Homeland': el viaje hacia ninguna parte
En sólo tres temporadas 'Homeland' ha pasado de ser una serie aclamada por todos a ser criticada hasta la extenuación. Sólo unos pocos fans sigue en el pelotón de la defensa frente a una inmensidad que reclama cambios o, directamente, el fin de la serie. La audiencia sigue acompañando pero, aunque la calidad técnica sea notable, la historia de la serie naufraga dando coletazos sin ton ni son. La gran pregunta es, ¿hacia dónde va 'Homeland'?
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Parece que fue hace muchos años cuando 'Homeland' nos tenía pendientes del próximo capítulo, agarrados al sofá de la tensión que nos provocaba saber quién era Brody en realidad. Lo que no sabíamos entonces, y que hoy conocemos con absoluta certeza, es que una vez resuelto el misterio de la identidad de Brody nos quedaríamos sin serie; o al menos sin 'Homeland' tal y como la conocíamos.
Se ha hablado mucho esta temporada del error que supuso no concebir 'Homeland' como una miniserie y por lo tanto con una única temporada. Podría haber sido mejor solución para remediar sus muchos males de ahora. O no. Lo que importa es que hoy tenemos una serie desubicada del lugar que le pertenece. La serie lucha contra sí misma para incluir elementos del pasado (la eterna duda sobre Brody y la inestabilidad de Carry) con el nuevo enemigo: Irán.
Es más de lo mismo sin ser lo mismo y ese es, precisamente, el motivo de la desafección de los espectadores. Sólo se salva, y con aprobado justo, el encuentro entre Carry y Brody, aunque no tan bueno como esperábamos, porque la serie ya no es tan buena como la recordamos.
'Homeland' sigue contando con un elenco notable pero limitado por el desarrollo de la historia, que se lo pone muy difícil. Tres capítulos antes de la Season Finale, el noveno de la tercera temporada, ha mostrado signos de recuperación. Ahora prepararán un estupendo cliffhanger final, con Brody enfrentándose al mismísimo líder del ejército iraní, al que tiene que asesinar para que su sustituto sea Javadi, antiguo amigo de Saúl y recientemente convertido a la causa norteamericana. Así de fácil.
Es todo tan enrevesado, tan efectista, que es imposible no tomar distancia y ver la serie como un mero entretenimiento sin nada más que sostenga la serie. Ni siquiera el embarazo de Carrie, una de las grandes novedades del año despierta el interés necesario. Demasiado desgaste, demasiadas trampas.
No es la peor serie actual pero sí es mucho peor que cuando empezó. Tiene suerte de tener una competencia muy floja, con pocas series de nivel que puedan hacerle sombra. Podría terminar ahora o tener tres temporadas más, porque ya 'Homeland' ha dejado ser 'Homeland' para ser la serie que viaja hacia ninguna parte.
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