RESUMEN DEL TERCER CAPÍTULO
Juego de Tronos 8x03: 'La Larga Noche' en 6 claves
Llegamos al ecuador de la octava temporada de 'Juego de Tronos', con una batalla épica que esconde una inesperada muerte. Si aún no has visto el tercer episodio de la última temporada de la serie, no sigas leyendo [Recap con spoilers].
Publicidad
En el episodio 8x03, ‘La Larga Noche (The Long Night)’, dirigido por el artífice de las mejores batallas de la serie, Miguel Sapochnik, apenas hay diálogos, compensados por un chute de acción apabullante. Arya se convierte en impensada heroína al salvar a Bran de las garras del Rey de la Noche, tras un cruento enfrentamiento, con Melisandre y los dragones de la Khaleesi como protagonistas.
Arya mata al Rey de la Noche (y Bran lo sabía)
¿Escuchan eso? Es el silencio de los fans de Juego de tronos cuando Arya salta sobre el Rey de la Noche y le asesta una puñalada que lo hace estallar en pedazos de hielo. El efecto dominó no se hace esperar y todos los resucitados mueren (¿para siempre?). ¿Cómo es esto posible? Tras una breve posesión de las suyas, en las que los ojos se le ponen en blanco, Bran parece más tranquilo de lo normal, como si supiera que no ha llegado su hora, que su hermana estará ahí para defenderle. También Melisandre, que sostiene la mirada de Arya al llegar al castillo (este reencuentro anunciado se ha cumplido). Melisandre le hace una pregunta retórica: “¿Qué le decimos al dios de la muerte?”. Y Arya responde: “No hoy”. Según la profecía (episodio 7x2) un príncipe o una princesa traería el alba al llegar la Larga Noche. Pero, si aún faltan tres episodios, ¿a quién se deberán enfrentar los supervivientes, son los Hijos del Bosque los verdaderos enemigos, el Rey de la Noche podría volver cual Thanos, qué barrunta Cersei en su trono? Habrá que verlo. Arya se sale en este episodio, salva al mismísimo Perro (luego Clegane se la devuelve, diciéndole a Dondarrión que “no se vence a la muerte”), corta cabezas con su lanza y se deshace de un buen puñado de espectros que la acorralan entre estanterías (esta secuencia está entre los zombies de The Walking Dead y los dinosaurios de Parque Jurásico).
El poder de Melisandre (menos mal)
Recordemos que Melisandre resucitó contra su voluntad a Jon Nieve, siguiendo las indicaciones de Thoros de Myr, con la ayuda del Señor de la Luz, y que Jon desterró a la sacerdotisa por este motivo. La Mujer Roja reaparece en la noche y sin que nadie le diga nada ella hace y deshace. Vuelve a invocar a su dios y de las arahks sale fuego, al estilo Dondarrion. Este es uno de los momentos más espectaculares del episodio, en el que se vislumbra el esperado combate del fuego contra el hielo. “Valar morghulis”, le dice a Gusano. “Valar dohaeris”, responde él. Todos están dispuesto a morir para defender el castillo, a los suyos. También cuando prende las trincheras, para contener a los muertos. “Habré muerto antes del alba”, le asegura a un receloso Davos. Jon Nieve se la tenía jurada, de ahí su promesa. En efecto, cuando todo acaba, Melisandre se deshace del collar con el rubí, tal y como hizo en la última escena de La Mujer Roja, frente al espejo, mostrándola tal como es, una anciana. En esta última ocasión, sin el collar, se le encanece el pelo y en la lejanía Davos comprueba cómo se desploma, muerta. Sin Melisandre, las posibilidades de resucitar a Jon Nieve (si es que las había) son nulas.
Una batalla suicida (con zombies a tutiplén)
Hay un momento de la contienda donde no sabes dónde mirar. Todos se unen contra el enemigo común, hasta el lobo huargo Fantasma. Van a ciegas, iluminados gracias a Melisandre, hasta que topan con algo (que son los muertos apilados en forma de muro impenetrable) y las luces de fuego se van extinguiendo. Este momento impresiona, no se ve nada, todos miran de lejos, incrédulos, sin saber qué hacer. Pero, ¿qué se esperaban? Todos los dothrakis caen. Jorah regresa despavorido. Si fuera por Jon seguirían de brazos cruzados esperando al Rey de la Noche, pero la khaleesi, por fin, reacciona ante el ataque de los espectros (y de esqueletos en homenaje a Harryhausen), una gigantesca horda de zombies hambrientos. ¿Podían haber usado antes a los dragones? Pues, seguramente, pero nos hubiéramos perdido el momentazo de Melisandre y alguna que otra baja dolorosa. El plano cenital, desde el cielo, con los miles de muertos corriendo hacía el castillo y escalando las murallas al estilo de Guerra Mundial Z son de escándalo.
¡Dracarys! Qué les pasa a estos dragones
Ante el fuego, el hielo. Un manto de nieve parece apagar las llamas. Aunque prenden las trincheras y Dany se anime gritando ¡Dracarys! lo cierto es que los dragones no están en su ambiente y andan perdidos. Se chocan entre sí, no ven, se llevan por delante medio bosque. La poca visibilidad hace que asciendan sobre las nubes, en una de las imágenes más oníricas de la serie, con la media luna de fondo. Viserion expulsa su fuego azul y casi destruye el castillo, pero el Rey de la Noche no las tiene todas consigo y cae de la montura, como también lo hace Jon tras una sangrienta pelea a mordiscos de las dos bestias. El fuego de Drogon no puede con el Rey de la Noche, Jon se ve rodeado de sus propias tropas resucitadas, pero Dany le rescata aunque se le suben los muertos al dragón, propinándole cuchilladas. Todos desmontan, los dragones ya no intervienen, el cara a cara es lo que impera y Jorah salva también a su amada khaleesi.
Tyrion y Sansa, amor tardío
En la cripta están las mujeres, los niños y… Tyrion bebiendo.
El enano mucho decir que tendría que estar ayudando fuera (como en Aguasnegras), pero abraza la sugerencia de Sansa, con la que mantiene una extraña tensión sexual. “Vuestro ingenio no marcará la diferencia”, le asegura la Stark. El Lannister dice que deberían seguir casados, y ella, zalamera, que Tyrion fue el mejor de sus maridos (porque no la violó, básicamente). Me gusta Missandei, cómo defiende a la Madre de los Dragones: “Sin ella no habría problemas pero estaríamos muertos”. Cuando sepan que ha sido gracias a Arya, van a flipar. Sansa (aferrada al puñal que le da su hermana) y Tyrion acaban escondiéndose juntos.
Algunos hombres buenos… mueren
Además de Melisandre, otros personajes caen en la contienda. Edd es apuñalado por la espalda, tras salvar a Sam (que no para de gimotear). Dondarrion, apuñalado entre varios espectros (y ya no puede ser resucitado más). La pequeña Lyanna a manos de un gigante, pero al menos le clava un puñal en el ojo y se lo carga (no se queda en la cripta, ejem, como otros). Tras defender a Bran como si le debiera la vida (“eres un buen hombre”, le redime Bran), Theon es atravesado con su propia lanza por el Rey de la Noche. Jorah acaba también apuñalado defendiendo a Dany (como no podía ser de otra manera). Dany le llora y Drogon se acuesta a su lado como lo haría el perro más fiel (aquí, se nos salta la lágrima).
· · ·
Seguro que te interesa
Te abrirá los ojos: Emilia Clarke se pronuncia sobre la polémica con Daenerys en 'Juego de Tronos'
Publicidad