¡Increíble! Marron nos enseña el futuro de los circos con animales

La Fiesta Escénica, bajo la dirección artística de Abel Martín, ha redefinido el circo tradicional con un enfoque innovador, ganando premios por su visión en este campo. Especializados en crear figuras robóticas y animatrónicas, su misión es mantener vivo el imaginario del circo clásico, pero sin utilizar animales reales. Cada creación está inspirada en animales que históricamente formaron parte del circo, como elefantes, camellos y osos polares, logrando espectáculos visualmente cautivadores y respetuosos con los derechos animales.

Los osos polares, por ejemplo, han generado tanta impresión en el público que incluso han recibido denuncias de espectadores creyendo que los animales eran reales. Estos osos son movidos por un actor desde el interior, logrando gestos y expresiones extremadamente realistas. De igual forma, los camellos requieren la colaboración de dos personas para sus movimientos detallados, mientras que los elefantes —considerados una de sus creaciones más sofisticadas— son totalmente robotizados y controlados electrónicamente. Cada animatrónico es fruto de un trabajo minucioso en diseño y tecnología para replicar fielmente los comportamientos de los animales, manteniendo el respeto por el bienestar animal.

La Fiesta Escénica, con Abel Martín al frente, ha alcanzado reconocimiento internacional en el ámbito del circo, obteniendo premios por innovación y ética en sus producciones. Este reconocimiento internacional se debe no solo a la sofisticación técnica de sus animales animatrónicos y robóticos, sino también a su compromiso con el bienestar animal. Entre sus logros destaca la integración de elefantes robotizados y osos polares animatrónicos que han sorprendido al público y críticos, particularmente en festivales europeos de renombre, como el Festival Roncalli en Alemania, donde sus figuras han sido aclamadas por su realismo y precisión.

Además de sus premios en España, La Fiesta Escénica ha ganado admiración y presencia en festivales y teatros en Estados Unidos y Francia, donde han presentado su espectáculo combinando acrobacias de alto nivel y sus característicos animales animatrónicos. Estos logros no solo reflejan su destreza en animatrónica, sino también su capacidad de adaptar y preservar la esencia del circo clásico en un formato moderno y ético que ha cautivado a la audiencia y ha marcado un hito en la evolución del circo ético a nivel mundial.