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SOLICITAN AL OBISPADO QUE LE TRASLADE
Los vecinos de un pueblo de Ciudad Real denuncian las continuas faltas de respeto de su párroco
Los vecinos de San Carlos del Valle (Ciudad Real) están indignados con su párroco. El sacerdote de la localidad niega la comunión a los que no dan donativos, se opone a confesar a los que se saltan alguna misa y no tiene pudor a la hora de echar del templo a los que hablan un poco alto.
El perfil que dibujan los vecinos de su párroco es el de un hombre prepotente, maleducado y obsesionado con el dinero. El religioso está desaparecido, ha dado de baja su teléfono y no recibe a los medios. Sólo ha pedido disculpas una vez, a una feligresa en concreto. y desde el púlpito de la Iglesia.
Sin embargo, a los vecinos no les vale el propósito de enmienda porque ha faltado muchas veces al respeto a la localidad. Después de 10 años de problemas con el padre Miguel solicitan que se vaya del pueblo y sea sustituido.
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