Las condiciones que pusieron los mineros al operativo para entrar a rescatar a Julen en el pozo de Totalán

A primera hora de este jueves la Brigada de Salvamento Minero recibía la llamada que iniciaría la fase final del rescata de Julen en el pozo de Totalán (Málaga). Los efectivos entrarían en el tubo creado 'ad hoc' para bajar a la profundidad a la que se encuentra el niño y en ese momento escavarían una galería horizontal para llegar a él.

Para poder iniciar los trabajos los mineros pidieron dos medidas fundamentales que garantizarían la efectividad de las maniobras. En primer lugar solicitaron que se realizara un rellenado de tierra en el pozo paralelo al de Julen para que no vibrase el tubo al introducirlo. Era clave que decreciese el terreno para que no vibrara la instalación.

Los profesionales se dieron cuenta de que los taludes no eran estables y había una roca de grandes dimensiones que había que asegurar. Solicitaron al operativo que decrecieran la superficie 12 metros y crearan una base de trabajo estable. Un trabajo que llevó entre 2 y 3 horas a los efectivos.

"Los taludes no eran estables y había una roca de grandes dimensiones"

La precisión de la colocación del tubo en el agujero sería clave para que los mineros picaran en la dirección correcta."Como el tubo dio tantos problemas a la hora de encajarlo solicitaron que la empresa del geolocalizador que rescató a los mineros chilenos en 2010 volviera a hacer la misma medición para asegurar que la ventana de la jaula quedara alineada con el pozo en el que se encuentra el niño", explicaba el periodista de Diario Sur, Juan Cano.