Preparacionismo

Un constructor de búnkeres explica el creciente interés en ellos y sus condiciones: "Preparado para vivir bajo tierra"

Francisco Márquez se dedica a la construcción de instalaciones subterráneas, muy frecuentemente destinadas a servir como búnker. Ante la situación geoestratégica y el panorama internacional de creciente tensión, el profesional de los refugios asegura que han visto incrementada su actividad en las últimas semanas.

Construcción de búnkeres

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La Comisión Europea ha realizado una advertencia a toda la ciudadanía esta semana. Recomiendan la preparación de un kit de supervivencia para un mínimo de 72 horas. Esto ha generado cierta alarma en algunas personas, y en otras ha despertado una inquietud por las posibilidades de protección propia y de sus familias.

"Preparado para vivir bajo tierra"

Francisco Márquez trabaja para 'Underground Buildings', y da algunos detalles de estas estructuras precisamente desde una de las que están instalando en una vivienda. El secretismo de estos proyectos es fundamental para proteger a quienes deciden construirse un búnker para afrontar las contingencias que puedan surgir. Lo hacen siempre bajo demanda.

La horquilla de precios es muy amplia, tanto como su equipamiento y nivel de comodidad. Francisco jugaba al despiste y situaba el intervalo en torno a los 30.000 euros, sin embargo la periodista de Antena 3, Desirée Hernández, había hecho sus propios cálculos. El presupuesto para construcción del refugio en cuestión, que según el profesional era más o menos de un nivel básico, ascendería a unos 200.000€, según develaba Desirée.

Totalmente equipado: "Como una vivienda"

Este habitáculo en cuestión constaría de 2 módulos en los que se incluirían varios espacios, uno a modo de dormitorio, una cocina, un cuarto de baño y desde luego gran espacio de almacenamiento para agua y víveres. Con instalación eléctrica dependiente de generadores, posibilidad de sistemas de bombeo e incluso depuración de agua y aire. Todo ello tratando de aprovechar al máximo el espacio y por supuesto bajo tierra, priorizando la seguridad que aportan varios metros de tierra compacta sobre la estructura.

"Como una vivienda (…) Tiene todo preparado para vivir bajo tierra", aseguraba Francisco, que también daba el dato de la capacidad de este moderno búnker, entre 8 y 10 personas de aforo máximo.

Un interés multiplicado

Desde febrero de 2022 el interés por estas instalaciones ha aumentado considerablemente. Hasta un 200%, según explicaba Francisco. En esa fecha se produjo el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania y una ola 'preparacionista' se extendió en parte de la población mundial, por el temor a que el conflicto armado alcanzara proporciones de guerra mundial.

Ese interés se ha renovado ahora con las recomendaciones de Bruselas para la elaboración de esa 'mochila' de subsistencia individual: "La gente está preguntando, preguntando, y a ver cuánto vale".

El programa retomaba el análisis de los militares retirados Miguel Ángel Ballesteros, general de Brigada y exdirector del Departamento de Seguridad Nacional, y el Almirante Juan Rodríguez Garat. Precisamente el segundo de ellos hacía una valoración sobre la este tipo de infraestructuras: "Los ciudadanos deberían saber que la defensa contra la guerra nuclear no está en los búnkeres. (…) La defensa es el arma nuclear".

Destacaba cuando abordaban la escasez de refugios de nuestro país, el que menos tiene de Europa en contraposición de otros países del continente como Suiza, donde la presentadora Susanna Griso tuvo una experiencia que no olvida.

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