Así está siendo la demolición controlada del edificio siniestrado en Madrid

El edificio de lacalle Toledo en Madrid está en riesgo de colapso tras la explosión de gas que sufrió el pasado miércoles. Este viernes continúan las labores de demolición para derribar sus plantas superiores.

El incidente, que provocó la muerte de 4 personas y una decena de heridos, ocurrió pasadas las 15:00 horas del miércoles.

Para garantizar la seguridad de los vecinos de la calle Toledo, se ha procedido a la demolición controlada de las plantas superiores del edificio, con el fin de evitar un derribo natural causado por los desperfectos de la explosión.

Las labores se iniciaron el pasado jueves, cuando los servicios de emergencia empezaron a retirar, apoyados por grúas, los escombros de lo que queda en pie del número 98 de la calle Toledo.

Para evitar cualquier tipo de riesgo, la demolición controlada se hará progresivamente, por lo que podría durar varios días, de acuerdo a declaraciones de los técnicos a Espejo Público.

Mientras, continúan las investigaciones para averiguar el origen de la explosión. Por el momento, se conoce que el operario al que llamaron los sacerdotes cuando olieron a gas no estaba manipulando ninguna de las siete calderas que había en el bloque.

Tras la llamada del párroco, el técnico acudió al edificio para supervisar los radiadores y determinar el origen del olor, pero no llegó a manipular ningún artefacto. Por tanto, se piensa que lo que pudo originar la detonación fue la concentración de una bolsa de gas en gran cantidad, producto de una fuga.

La empresa suministradora, Gas Natural, no ha restablecido por el momento el abastecimiento de gas a los vecinos de la calle Toledo, a la espera de confirmar las causas del incidente.

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