El curioso método para colar minimóviles en las cárceles mediante paquetes de galletas

La imagen de una lima escondida dentro de una tarta es uno de los clichés cinematográficos más vistos en las cárceles. Sin embargo, hay veces que la realidad supera a la ficción y esos obsequios infiltrados intentan introducirse en los penales de las formas más increíbles.

Es el caso de los minimóviles. Un medio de comunicación con el exterior muy codiciado por los presos. El uso de teléfonos móviles está prohibido en las cárceles pero con estos artilugios minúsculos muchos logran tener acceso a estas comunicaciones pasando desapercibidos para los funcionarios de prisiones.

Recientemente las autoridades penitenciarias han detectado un curioso lugar para introducir el teléfono móvil. El espacio cilíndrico de un inofensivo paquete de galletas se convierte en este caso en el escondite perfecto para meter un pequeño teléfono móvil con un cable.

Puedes volver a ver el curioso lugar en el que han intentado colar un minimóvil en una cárcel en Espejo Público a través de Atresplayer.