Empieza el calvario judicial para la exalcaldesa de La Muela

La Muela ha sido siempre un lugar en el que el viento sopla como en pocos lugares. Preciesamente fue eso, el viento, el cierzo, lo que convirtió a La Muela en uno de los pueblos más ricos de España. El desarrollo de la energía eólica dejó más de 500 molinos y una población que pasó de los 800 a los 5.000 habitantes. De la noche a la mañana La Muela empezó a tener infraestructuras propias de una gran ciudad. Un moderno auditorio, una flamante plaza de toros que inauguró el mismísimo Julio Iglesias, un polideportivo espectacular, casi tanto como sus tres museos y un aviapark. Todo era posible en la Muela, hasta irse todo el pueblo ed vacacioens al Caribe a costa del ayuntamiento al frente del cual se encontraba la ahora imputada Marivi PInilla.

Tanto derroche era dificil de mantener. En realidad solo 300.000 de los 33 millones de euros del presupuesto municipal venían de los molinos, el grueso se obtenía de las licencias urbanísticas. El viento que les hizo ricos empezó a soplar en contra cuando en 2009 se destapó la trama que al parecer había tejido durante años la alcaldesa. La llamada "Operación Molinos". ¿El resultado?  es que hoy La Muela es un pueblo plagado de instalaciones cerradas por falta de liquidez. La trama corrupta dejó una deuda de 25 millones de euros, unos 5.000 euros por vecino y un agujero a Hacienda de más de 8 millones.

Mariví Pinilla se enfrenta a 37 años de cárcel por cohecho, prevaricación y blanqueo de capitales pero hay 41 imputados más. De hecho La Muela es, a día de hoy el pueblo que concentra la mayor densidad de presuntos corruptos de nuestro pais, en concreto 1 imputado por cada 120 habitantes, 10 veces más que en Marbella aunque hay que decir que la mayoría no son ni han sido nunca vecinos.

Ayer Mariví Pinilla se sentó por primera vez en el banquillo. Se trata de una denuncia por prevaricación, para el macrojuicio de la operación Molinos todavia no hay fijada una fecha. La alcaldesa y los otros 41 imputados se enfrentan a penas que suman 263 años de cárcel.