Excluido de un campamento un niño de 5 años de León: "Nuestro hijo no es un perro, ni un monstruo"

Fidel es un niño que vive junto a sus padres en el municipio de Molinaseca, en la provincia de León. Este verano como miles de niños en toda España, el pequeño tenía una ilusión enorme por acudir a un campamento de verano, pero la hidrocefalia que padece supone un obstáculo insalvable a ojos del Ayuntamiento de esta pequeña población de León, que ha decidido expulsar al pequeño.

Aunque el niño acude como uno más a un colegio ordinario de la cercana localidad de Ponferrada, los responsables del Ayuntamiento leonés han tomado la decisión de excluir unilateralmente al niño del campamento de verano que organizan para los niños del pueblo.

La mañana de este viernes los padres del menor, Eva y Alberto, denunciaban en Espejo Público la injusta situación que viven, porque Fidel va a ser el único niño de la localidad que no pueda disfrutar de la actividad junto al resto de sus amigos y compañeros. D3esde la más profunda impotencia e indignación, los propios padres exclaman: "Nuestro hijo no es un perro, ni un monstruo".

"Total normalidad"

Alberto y Eva realizaron la inscripción de su hijo con total normalidad. También procedieron al pago de la cantidad requerida, informando al Ayuntamiento de la población leonesa de la situación del niño, para que lo pusieran en conocimiento de los organizadores y de los monitores contratados para la actividad.

La madre explicaba cómo Fidel fue a una Escuela Infantil de Molinaseca con el resto de niños, y en el colegio al que asiste, Fidel participa de todas las actividades como excursiones y cumpleaños en compañía de los demás compañeros.

La llamada de la decepción

Eva, madre de Fidel, relataba cómo el pasado martes recibió la llamada telefónica de un funcionario del consistorio. El trabajador público comunicaba a su madre que habían tomado la decisión de dar de baja al pequeño por un motivo económico. El Ayuntamiento no se quería hacer cargo de los gastos adicionales que supondría la contratación de un monitor especializado y dedicado a Fidel, para que el niño pueda participar de la actividad: "Cuesta 1.400 euros y el Ayuntamiento no está dispuesto a pagarlo".

"Nos habían dicho que no iba a haber ningún problema"

Los padres no daban crédito ante lo que les comunicaban. En caso de querer que su hijo participara en el campamento de verano, "financiado por la Junta", en palabras del padre, desde el Ayuntamiento les indicaron que deberían afrontar ellos el pago del monitor extraordinario.

"Ningún problema"

Espejo Público consultaba también el incidente con la empresa organizadora, que por su parte aseguraba que no tendrían inconveniente alguno en la inclusión del niño. Además los organizadores también afirmaban que tendrían experiencia con casos similares y personal cualificado a tal efecto.

¿Campamento peligroso?

Según explicaba la madres, este campamento está destinado a niños de 3 a 12 años de edad. Sin embargo el Ayuntamiento se excusaría en que el niño debería participar de otra actividad que no requiriese la presencia de personal médico y de enfermería.

"¡¿Qué actividad peligrosa puede hacer un niño de 3 años?!", exclamaba una incrédula Eva, a la que habrían argumentado que el senderismo no sería apto para su hijo. Este hecho no hizo más que incrementar la indignación de la madre, que se hacía una nueva pregunta: "¿Pero qué van a hacer, una excursión de 6 kilómetros?!

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