Una extrabajadora de UGT investigada por estafar 4 millones de euros en compras personales

Maika Tomás López trabajaba como administrativa en el sindicato UGT y, con el dinero malversado, habría adquirido numerosos artículos de lujo como cosmética de alta gama, zapatos de primerísimas marcas mundiales, botellas de vino y Champagne, etc.

La Policía sospecha que la sospechosa se hizo con la numeración y claves de la tarjeta corporativa vinculada al que fue Secretario General del sindicato en Madrid hasta el año 2021.

Esta tarjeta bancaria estaría vinculada a una cuenta donde se depositaba dinero procedente de las cuotas de afiliados así como subvenciones de dinero público y su uso estaría dirigido a cubrir exclusivamente gastos de la organización.

La extrabajadora de unión sindical tras hacerse con la información de la tarjeta habría comenzado a realizar todo tipo de compras personales y hoy se investiga una posible desviación económica que podría alcanzar los 4,5 millones de euros.

Viajes, material electrónico,

Entre las muchas adquisiciones que habría hecho Maika Tomás con la tarjeta del sindicato para el que trabajaba, destacan televisores, teléfonos móviles, un patinete eléctrico y más material electrónico.

En cuanto a su afición a viajar, Maika no habría escatimado en gastos a la hora de elegir destinos exclusivos y lujosos. Mallorca, París, Miami, Doha, Tanzania, serían algunos de los destinos en los que habría empleado dinero ajeno.

Vacaciones multitudinarias

Entre los múltiples viajes que la investigada habría adquirido destacaría uno que habría pagado para ella y otras amigas, y que supuso 12 trayectos de ida y vuelta. Pero por encima de todos uno con destino a Gran Canaria en el que habría pagado el pasaje a 23 amistades, por supuesto con regreso incluido. La cantidad destinada a viajes que habría estafado Maika superaría los 162.000€.

Vehículos y cirugía plástica

La lista de gastos en el tren de vida de la sospechosa seguiría creciendo y también incluiría coches, tratamientos de medicina estética o fiestas. Las autoridades estiman que pudo llegar a falsificar 600 cheques bancarios que emitiría con nombre falso y luego cambiaría poniendo el suyo o de personas cercanas.

En 2021 saltan las alarmas

A finales de 2021, transcurridos más de tres años desde que comenzaran los supuestos actos delictivos, fue cuando se observaron las primeras irregularidades. La UDEF le imputarían delitos de estafa continuada y falsedad documental, pero a las autoridades les extraña que en el sindicato no se percataran de los hechos con anterioridad.

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