El fotógrafo que retrató al falso obispo que asesora a las monjas clarisas de Belorado: "Desde que te abre la puerta pasas a un portal temporal"

El lunes 13 de mayo comenzó la rebelión de un convento de monjas clarisas de Belorado en Burgos y Orduña en Vizcaya. Las hermanas, conocidas por sus dulces de chocolate, anunciaron en un comunicado que abandonaban la iglesia de Roma tras denunciar una persecución. El comunicado firmado por la madre sor Isabel de la Trinidad, en nombre de todas las religiosas, explica que a partir de ahora se encuentran bajo la tutela de Pablo de Rojas Sánchez-Franco.

¿Quién es Pablo de Rojas?

Pablo de Rojas fue excomulgado como obispo en julio de 2019. Tiene 42 años y vive en Bilbao. Su contacto con las hermanas se produjo a través de José Caecero, el consejero espiritual de las monjas. De Rojas defiende una teoría de la conspiración que afirma que el último Papa valido en el Vaticano fue hace más de 60 años con Pío XII. Aseguran que dese entonces la evolución de la iglesia es satánica y él es el único defensor que queda de la fe católica verdadera y tradicional.

El obispo excomulgado tiene en un municipio de Palencia lo que denomina un "seminario de vocaciones" de donde obtiene sus ingresos. Desde hace un par de años imparte formación religiosa a jóvenes que tengan vocación bajo sus doctrinas. La institución se denomina como casa sacerdotal pero el arzobispado de Palencia recuerda que todos sus miembros están excomulgados y que están totalmente al margen de la iglesia católica.

Hablamos con el fotógrafo que ha estado en su casa

En el programa Espejo Público hemos podido hablar con Borja Agudo, fotógrafo. Borja pudo conocer más de cerca a Pablo Rojas cuando entró en su casa para realizar un reportaje fotográfico personalizado que él mismo le había encargado. El reportaje se realizó en su casa de Bilbao. Una casa de más de 300 metros cuadrados en una de las zonas más exclusivas de la ciudad vasca. "La casa era de flipar", asegura el fotógrafo. Borja cuenta que la decoración era antigua y que todos los muebles y el ambiente desprendían un olor a madera vieja, "era un ambiente raro".

"Desde que te abre la puerta una doncella pasas a un portal temporal". Pablo de Rojas cuenta con una pequeña capilla en la habitación donde dio misa el día del reportaje a su doncella y a su mayordomo incluso al propio fotógrafo. "Les tocaba la campanita para pedir algo", explica Borja sobre la relación del exobispo con sus empleados del hogar.

Borja cuenta que cuando acudió a hacer las fotografías y se encontró con ese escenario bromeo con la redactora "de aquí no vamos a salir vivos o nos capta para una secta". El fotógrafo también destaca un retrato en su despacho que le llamo la atención en el que se encontraba Franco.

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