Luis Planas: "Hay que evitar guerras de precios que planteen una restructuración del sector que no le conviene a nadie"

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, analiza el papel que juegan los alimentos en una inflación al alza en la que hacer la compra se haya convertido en un imposible para muchas familias de escasos recursos.

Apunta que el Gobierno está interesado en que los ciudadanos "tengan alimentos de calidad, en cantidad suficiente y a un pecio razonable". Reconoce que es complicado porque el alza de precios tiene una relación con lo que está pasando en Ucrania y se refleja en un incremento en el coste de la energía, el incremento de las materias primas y el del precio del fertilizante.

Señala que "salvaguardando los intereses de cada eslabón de la cadena alimentaria los ciudadanos esperan una contención de precios que necesitan desde el punto de vista del consumo". Apunta además que hemos vivido muchos años con una inflación muy baja y "en función de las circunstancias de la salida de la pandemia y la guerra de Putin estamos aquí". El Gobierno pide responsabilidad a cada miembro del eslabón de la cadena y "que cada uno haga lo que esté en su mano para conseguir que los ciudadanos dispongamos de esos precios razonables que tenemos ahí". "Cualquier otro instrumento me parece forzado", mantiene.

El ministro cree que hay buena disposición y "todo el mundo manteniendo la rentabilidad aunque sea a niveles mínimos está dispuesta a hacer algo". "La cadena alimentaria funciona bien y hace falta un esfuerzo colectivo para que cada uno asuma su responsabilidad", afirma.

"Hemos vivido muchos años con una inflación muy baja y en función de las circunstancias de la salida de la pandemia y la guerra de Putin estamos aquí"

Planas ha aportado el dato de que en España hay 914.000 explotaciones agrícolas y ganaderas, 30.200 industrias agroalimentarias y 24.000 tiendas de alimentación. De ese total de tiendas el 70% son supermercados y los 3 mayores grupos concentran el 35%. "Hay una realidad de cadenas de tipo medio con implantación autonómica en Andalucía, Comunidad Valenciana y mucho pequeño comercio y en este contexto la realidad y los intereses de cada uno son diferentes. Hay que evitar guerras de precios que planteen una restructuración del sector que no le conviene a nadie".

Asegura que el Gobierno está haciendo un gran esfuerzo y el FMI y la Comunidad Europea recomiendan que los incrementos de recaudación estén dirigidos a medias dirigidas a sectores que lo necesitan como las ayudas al gasóleo, la gasolina y el IVA del gas que ha puesto en marcha el Ejecutivo.

En relación con el IVA de los productos alimentarios explica que se sigue el esquema europeo: hay un tipo normal, un tipo reducido y uno superreducido. En el normal están las bebidas alcohólicas y azucaradas, en el superreducido: leche huevo pan harina frutas hortalizas y quesos y en el resto productos transformados y la carne y el pescado, que están en el 10%. "Se trata de un esquema genera que admite pocos ajustes y las consecuencias individuales y colectivas de cada familia serían muy limitadas", añade.

Sobre el impuesto a la distribución que pide Unidas Podemos, considera que se justifica una actuación temporal y extraordinaria en función de unos beneficios extraordinarios que son consecuencia de la inflación. Afirma que las empresas energéticas están teniendo unos ingresos extraordinarios derivados de la inflación y son "los llamados beneficios caídos del cielo".

"Las empresas energéticas están teniendo ingresos extraordinarios derivados de la inflación y caídos del cielo

Cree que esta situación no está dentro del marco del mercado agroalimentario porque es totalmente distinto y no está regulado porque es libre de oferta y demanda que funciona bien con normas de la UE y nacionales. Afirma el ministro que el Gobierno está dispuesto a continuar trabajando en toda iniciativa que pueda llevar a precios más asequibles.

Sobre el dato del IPC definitivo del mes de agosto del 10,5%, una décima más que el IPC adelantado, desconoce cuándo empezará a bajar la inflación en un escenario de alta volatilidad basado en la guerra de Ucrania. "En el campo agroalimentario estamos viendo la caída del precio de los cereales que se había elevado mucho en los últimos meses. El índice alimentario de la FAO a 4 meses seguidos muestra una reducción de los productos alimentarios pero hay que estar atentos para ayudar a quien lo necesite en esta situación".