¿Se están "forrando" los supermercados por la inflación?

Mercadona y otros grandes supermercados se están "forrando", a juicio de Podemos, por la inflación y por no trasladar la reciente bajada del IVA.

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, deslizó esta reacción el viernes en las Jornadas Confederales de Acción Sindical de UGT minutos después de que el Instituto Nacional de Estadística confirmara que la cesta de la compra se encareció año sobre año el 15,7 por ciento.

El porcentaje genera más rechazo al cruzarlo con el resto de las mediciones que tienen que ver con la inflación. Y es que compara con una tasa general de precios (IPC) del 5,7 por ciento y con el 7 por ciento del tramo subyacente -excluye los productos más volátiles: alimentos no procesados y energía-.

Dicho de otro modo, en España lo que más se encareció en diciembre fue lo más esencial para el día a día.

El sector de la distribución interpretó la reacción de Díaz como una advertencia de lo que está por venir: la ya bautizada como "tasa Mercadona". La vicepresidenta, recuerdan las fuentes consultadas, fue la primera integrante del Ejecutivo Sánchez en poner sobre la mesa los impuestos específicos para bancos y energéticas.

Las declaraciones que sembraban dudas sobre la honestidad de los supermercados prosiguieron durante el fin de semana, con declaraciones de Ione Belarra que defendían la intervención de precios.

El lunes la escalada elevó el tono. Belarra señaló sin subterfugios al dueño de Mercadona, Juan Roig. La ministra de derechos sociales dijo micro en mano que era un "indecente". Los nombres propios que Díaz evitó pronunciar ya no hacía falta deducirlos.

El asunto generó un nuevo episodio de división en la coalición de gobierno. El PSOE, a través de Pilar Alegría, afeó el tono de sus socios.

La polémica fue objeto de debate en Espejo Público el martes. Los analistas presentes en el programa nos centramos en la criminalización de Roig y del resto de empresarios del sector que suponen estas declaraciones de dos representantes del Gobierno. Y es que se promulgan acusaciones sin pruebas. Y, en caso de haberlas, el Gobierno tiene instrumentos, como la Fiscalía General del Estado, para abrir las investigaciones que procedan y evitar daños reputacionales gratuitos.

Pero al margen del debate político, ¿es cierto que Mercadona se esté "forrando" por la inflación? En una economía de libre mercado como la española, con una red de competidores accesible y diversos observatorios de precios –como la OCU— en todos los sectores la respuesta debería dar igual.

Las empresas tienen la misma libertad para aplicar los precios que quieran que los clientes para elegir dónde comprar.

Si los grandes empresarios no ponen en duda la legitimidad del exceso de recaudación del Gobierno por el IVA adicional que trae la inflación –unos 40.000 millones más de lo normal—, al Ejecutivo tampoco debería preocuparle lo que hagan las empresas mientras sea legal.

En cualquier caso, un estudio de Economía Digital asegura que Mercadona gana 2,6 euros por cada 100 que factura. Al contextualizar esta cifra se aprecia cómo los números desmontan el discurso político.

Inditex gana 10 por cada 100, mientras que en el caso de los bancos esa cifra mejora hasta los 20. Hay pocos sectores con márgenes menores que los supermercados. Entre las escasas excepciones, se cuenta otro grupo de empresas también con el foco constante sobre su actividad: el de las aerolíneas.

Un bar bien gestionado tiene un margen superior al de la compañía más eficiente de Europa, Ryanair.