El Caso José Bretón cumple 10 años

Nacho Abad saca a la luz un dato inédito del crimen de los niños de Córdoba a manos de su padre José Bretón

Se cumplen diez años de uno de los crímenes más oscuros de la crónica de sucesos de nuestro país. El crimen de los pequeños Ruth y José, de 2 y 6 años, a manos de su padre José Bretón. Hablamos con el profesor Francisco Etxeberría, el forense que dio un vuelco al caso y descubrió que el padre había quemado a sus hijos.

Francisco Etxeberría, antropólogo y médico forense, fue el encargado de esclarecer qué había pasado con los pequeños Ruth y José. Los hermanos, de 2 y 6 años, desaparecieron cuando se encontraban con su padre, José Bretón. Este denunció que los había perdido en Córdoba. Finalmente, gracias al trabajo de Francisco Etxeberría se determinó que había quemado a sus hijos en una hoguera.

Señala Francisco Etxebarría que tiene un recuerdo entrañable de su relación con Ruth Ortiz, madre de los pequeños durante su trabajo en el Caso José Bretón. Recuerda el forense la relación que mantuvo con ella cuando le comunicó cómo se habían producido los hechos con toda seguridad. "Eso era muy importante para la familia y también para la sociedad porque el tema tuvo mucho interés social", apunta.

Cuenta el profesor que logró determinar que los huesos eran humanos en una conversación con el técnico de georradar Luis Avial, que había colaborado en el caso. "Entre profesionales nos intercambiamos datos, Luis Avial venía de Córdoba de la finca de Las Quemadillas. Le pregunté por la hoguera que era rectangular y cerrada. José Bretón decía que había quemado cajas de cartón con la ropa de su mujer y me extrañó que no hubieran aparecido botones, cremalleras u objetos metálicos", recuerda.

Cuando se enteró de que había unos huesos Francisco Etxeberría se mostró interesado en verlos. En este punto es en el que intervino el periodista Nacho Abad. Una historia que ha sacado a la luz en Espejo Público. Luis Avial le dijo a Nacho Abad que el profesor quería ver los huesos y le pidió la imagen. En una semana Nacho Abad le manda unas fotocopias de unas fotos de los huesos y el profesor dudó inmediatamente por los dientes y pidió ver las instantáneas en color.

Apunta Francisco Etxeberría que con las fotos pasó "del indicio a la evidencia y de la evidencia a la prueba". Con aquellas fotocopias "tenía indicios como los tenía la Policía judicial de Córdoba". Con las fotos y la intervención de la abogada y el juez del Caso José Bretón determinó que no debían seguir buscando a los niños porque sus restos estaban en la hoguera.

A partir de ahí el forense analizó los trozos de huesos de manera directa en la comisaría de Canillas. Señala que allí se sintió muy protegido por la Policía judicial y científica. "Fue como cambiar una pieza de un puzzle, ponerla en su sitio y a partir de ahí todo empieza a cambiar", explica.

Nacho Abad apunta que la técnico forense que no supo identificar los huesos como los de Ruth y José "ha pagado ese error enormemente". Pone de relieve que la forense pidió que hubiese una segunda persona que analizase los restos y no se hizo por parte de la Policía: "Un error lo cometemos todos y creo que es una maravillosa persona y médica forense", concluye.

Puedes volver a ver la entrevista completa a Francisco Etxeberría, antropólogo y médico forense, sobre el caso de los niños de Córdoba asesinados por su padre José Bretón en Espejo Público a través de Atresplayer.