Los niños no podían irse solos, única coincidencia de los padres de Ruth y José

Esther Chavez, portavoz de la familia materna, ha confirmado que la mayor de los niños era muy tímida y no se habría ido con nadie desconocido. Asimismo ha reconocido que el pequeño José siempre seguía a su hermana dónde esta fuera.

Por su parte, en la declaración de la familia de José Bretón ante el juez, sus versiones avalan sin fisuras la versión del padre de los pequeños. La madre, los hermanos y el cuñado de Bretón se han ceñido a sus dos anteriores declaraciones ante la policía.

"Han sido unas declaraciones normales, no incisivas, en las que se han ratificado en lo dicho con anterioridad. Se ha corroborado el cuadro cronológico que dio mi cliente y sólo se han producido algunas matizaciones", ha dicho el abogado defensor de Bretón a la salida de los juzgados.

Dicen estar convencidos de que los niños están vivos y que probablemente alguien conocido del entorno familiar los tiene retenidos. Han dado detalles sobre cómo iban vestidos y sobre qué y dónde comieron el día de su desaparición. Un punto en el que parecían incurrir en una contradicción ya que tanto la abuela como la tía aseguraban que los pequeños habían almorzado en sus respectivas casas.

Antonia Gomez, la madre de José Bretón, llegaba a la audiencia sóla en un taxi. Con aparente entereza esquivaba los micrófonos de los periodistas y entraba por la puerta principal. Preguntada sobre su hijo, ha asegurado que se trata de "un padre cariñoso" y que por su actual situación de desempleo tenía más tiempo para sus hijos. Interrogada por el juez sobre la posibibilidad de que les hiciera daño Antonia ha sido tajante. "Mi hijo no es capaz de hacer daño a nadie", algo que ya dio en los micrófonos de Espejo Público.

Catalina, es la hermana de Jose Bretón y su testimonio se considera clave. Es la persona en la que más confia. Ante el juez confirmó que los niños pasaron la mañana jugando con sus hijos pocas horas antes de su desapación. Muy discreto, Rafael Bretón, el hermano de Jose, se mantiene en un segundo plano y es el intermediario en la posible visita de la esposa de Bretón a su marido en la carcel. El fue quien recibió, según el abogado, la primera llamada cuando desaparecieron los niños.

El único que no declaró ante el juez fue Bartolomé Bretón. El abuelo de los niños podría haberlo hecho desde casa debido a su delicado estado de salud. declarado desde su casa debido a su delicado estado de salud.