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Pablo Aguado: "Muchos se creen animalistas por tener un perro encerrado en un piso y critican a quien cuida mil cabezas de ganado"
A Pablo Aguado la vocación por el toreo le vino de niño, después la dejó a un lado para emprender sus estudios universitarios y posteriormente la retomó. Asegura que haber empezado más tarde en los ruedos le hace ver lo duro que es este mundo.
A Pablo Aguado le costó terminar la carrera de ADE pero pudo compaginarla con su pasión por los toros y puede decir orgulloso que se licenció.
En su familia había afición a los toros pero ningún torero. Recuerda que en su primera comunión pidió de regalo una becerra y fue al primera vez que toreó. Después dejó la vocación a un lado y siguió la vida de cualquier chaval normal de su edad. Fue a mitad de la carrera cuando volvió a los tentaderos pero como aficionado.
A partir de ahí la afición le fue llevando cada vez más lejos hasta convertirse en el torero que es hoy a sus 30 años. Sus padres le pidieron que acabara la carrera, lo cual les agradece porque "eso te da otro poso en la vida". El empezar más tarde también le ha hecho "ser más consciente de lo duro que es el mundo del toro".
"El radical antitaurino no tiene la mente abierta"
Le duelen las críticas pero sabe encajarlas. "La gente cuando te critica es porque algo de razón lleva, sobre todo tu círculo más cercano", asegura.
Piensa que se ataca al toro por desconocimiento "por parte de los mal llamados animalistas". Considera Aguado que este colectivo no se da cuenta de que los verdaderos animalistas son los ganaderos que los alimentan y los cuidan. "Ahí es donde reside el verdadero animalismo. Se creen animalistas por tener un perro encerrado en un piso y critican al que tiene mil cabezas de ganado y las cuida", expone.
Cree que es imprescindible defender al toro y se pregunta qué animal tiene el privilegio de que cuando entrega su vida sea aplaudido por 20.000 personas. "Es un animal que es venerado y da de comer a muchas familias". Para Pablo "el radical antitaurino no tiene ninguna mente abierta".
Jugaba mucho al fútbol pero se lesionó la rodilla y lo dejó, ahora sale a correr. Le da miedo perder la ilusión por torear y tiene algo de miedo a las alturas, por lo demás el coraje corre por sus venas y sueña con ilusión en la próxima corrida.
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Puedes ver la entrevista completa al torero Pablo Aguado en Espejo Público a través de Atresplayer.