Asesinato Mocejón

Las posibles condenas para el asesino de Mateo: "Tendría que sustituirse la pena por el internamiento en un hospital"

Varias informaciones apuntan a que el asesino del niño de 11 años de Toledo podría sufrir alguna enfermedad mental. Estos son los posibles escenarios judiciales a los que se tendría que enfrentar.

Espejo Público analiza las posibles condenas a las que se podría enfrentar

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El presunto asesino de Mateo, el menor de 11 años que fue apuñaladoel pasado domingo mientras jugaba a fútbol, ya ha sido detenido. Se trata de un hombre de 20 años que estaba pasando unos días con su padre en el pueblo toledano de Mocejón, lugar donde tuvo lugar el trágico crimen. La detención se produjo durante la tarde del lunes, tras una intensa búsqueda en la que las cámaras de seguridad habrían sido clave para identificarle. El presunto criminal habría confesado el crimen ante la policía.

Aún se desconocen muchos detalles del caso, entre ellos el móvil del asesinato, aunque se descarta que se trate de una acción terrorista. Por su parte, las fuerzas de seguridad a cargo de la investigación continúan buscando el arma del crimen. Se baraja que Mateo no fuera el objetivo del asesino, e incluso nuevas informaciones apuntan a que este habría vuelto a perseguir a un joven de la localidad, un día después de cometer el crimen.

Durante la tarde del lunes también se llevaron a cabo varios registros en las casas del padre y la abuela materna del presunto detenido. Ambos son vecinos de Mocejón. El presunto asesino estaría viviendo entre el pueblo toledano y Madrid, donde reside su madre. Algunas filtraciones del interrogatorio sugieren que el agresor podría presentar alguna enfermedad mental.

Las penas a las que se podría enfrentar

Aún se desconoce el recorrido judicial que seguirá la causa, no obstante, de confirmarse que efectivamente padece algún tipo de condición mental, podrían aplicarse atenuantes.

Cabe recordar que el sospechoso es mayor de edad, y ha acabado con la vida de un menor, el cual se considera una víctima vulnerable. De esta forma podría enfrentarse a penas de incluso 25 años de cárcel, o podría aplicarse la prisión permanente revisable por asesinato.

"Una persona no imputable"

Espejo Público ha logrado contactar con un psiquiatra forense para tratar de entender qué podría haber empujado al joven de 20 años a cometer el crimen. El doctor José Carlos Fuertes, comienza apuntando a que podría explicarse por un "trastorno psicótico": "Estamos ante una enfermedad mental con mayúsculas, si esto se confirma (...) yo creo que estamos ante una persona claramente no imputable, es decir que no se le podría atribuir desde el punto de la culpabilidad este delito, sino que tendría que sustituirse la pena (...) por el internamiento en un hospital psiquiátrico penitenciario", asegura.

Fuentes continúa explicando que ahora estará en manos del juez "ordenar un reconocimiento psiquiátrico", una vez este finalice, el magistrado deberá decidir si orden "directamente su ingreso en prisión, o el ingreso en prisión de la enfermería del centro correspondiente, o trasladarlo a un centro sanitario, puesto que la gravedad en los síntomas y necesidad de un tratamiento haga aconsejable esta medida", finaliza.

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